Durante el presenta año 2012 que vivimos se conmemora el 450 aniversario del nacimiento del insigne escritor Don Félix de Lope de Vega y Carpio, uno de los más notables dramaturgos del Siglo de Oro Español, así también como uno de los más prolíficos autores de la literatura universal por la extensión de su obra.
De su pluma surgirían allá por el año 1609 los hermosos versos que compondrían “Fuenteovejuna”, una de sus obras más conocidas y representadas universalmente, basada en unos hechos históricos que acaecerían en la villa cordobesa alrededor de 133 años antes de ser escrita.
Fuenteovejuna ha sido, es y será un claro ejemplo de la unión y la lucha de todo un pueblo contra su opresor, de ahí que sea mundialmente conocida y que sirva de ejemplo a tantos casos de opresión y tiranía en países de los cinco continentes.
La primera representación del siglo XX de Fuenteovejuna en el escenario original donde acaecieran los hechos, la propia Fuente Obejuna, tuvo lugar en el año 1935 coincidiendo con el 300 aniversario de la muerte del escritor. Espectáculo éste que tendría la dicha de presenciar Federico García Lorca, uno por no decir el más conocido poeta en todo el mundo de la generación del 27. Margarita Xirgú, amiga personal del escritor, encarnaría aquel año el papel de Laurencia.
Los años 1956 y 1962 serían elegidos posteriormente para llevar a escena Fuenteovejuna en Fuente Obejuna, contando estas representaciones con las interpretaciones de los más reconocidos actores españoles de la época.
A partir del año 1992 y durante repetidas ocasiones, siete en concreto, han sido los naturales de la villa los encargados de representar su propia historia encarnando la totalidad de los personajes de la obra.
Considero que durante este año 2012 sería ideal representar “Fuenteovejuna” recordando y honrando a Lope de Vega con motivo del 450 aniversario de su nacimiento, aunque realmente pensándolo bien, año arriba año abajo no tiene la más mera importancia, teniéndose en proyecto representarla el próximo año 2013, conmemorando los 451 años del alumbramiento del poeta, fecha que aunque no resulte tan redonda recordaría un año más a este escritor del Siglo de Oro al que tanto debemos , y al que, me van a perdonar, no hemos sabido homenajear y honrar de la manera que se merece, ya que hasta en las inmediaciones del domicilio madrileño del poeta donde escribiera su obra, en concreto en la calle Huertas, los adoquines de esta céntrica vía madrileña acogen el grabado de uno de los sonetos más representativos de nuestra “Fuenteovejuna”. No quiero con esto menospreciar el digno monumento en forma de libro abierto que se le dedicó a Lope años atrás en la plaza de nuestro pueblo.
Sintámonos orgullosos de ser mellarienses allá por donde vayamos y lancemos a los cuatro vientos allá por donde pasemos el grito de ¿Quién mató al Comendador? ¡Fuenteovejuna Señor!.

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