Señor Víctor Pedregosa: Como vecino de Peñarroya-Pueblonuevo, quiero expresar lo siguiente. Está llevando a cabo una campaña electoral sucia, muy sucia. En todos los años que he vivido aquí, nunca había presenciado algo similar. No puedo creer que usted tenga la conciencia tranquila. Esto no es democracia. Espero y deseo que no sea usted el próximo alcalde de Peñarroya-Pueblonuevo.
Un candidato a la alcaldía no puede prometer empleo para todos con el único fin de obtener votos. No se puede jugar con las esperanzas de un pueblo como Peñarroya-Pueblonuevo, donde las promesas no son más que mentiras. Y eso es precisamente lo que usted continúa haciendo día tras día. Nadie posee una lámpara mágica que se pueda frotar para cumplir nuestros deseos, y prometer algo tan delicado como un puesto de trabajo es irresponsable. Seamos serios.
Mire, señor Víctor, permítame decirle que no está cualificado para ser alcalde, al menos en estos momentos. Viendo los dos debates que hemos presenciado y escuchado en los últimos días, realmente da pena. Incluso la candidata del partido Vox, quien también tiene mucho que mejorar, lo ha dejado fuera de juego en dos ocasiones. En un debate, es necesario brindar respuestas y presentar un programa que detalle lo que se hará en los próximos cuatro años. Se debe hablar con fundamentos, mirando al frente, sin leer ni consultar el móvil para ver lo que le escriben.
Creo que su candidatura en las elecciones municipales es simplemente una cuestión económica por su parte. Usted ya cuenta con un salario más que aceptable en la Diputación. Digo que no está mal porque, considerando la escasa frecuencia con la que va a Córdoba y lo poco que hace por su pueblo, creo que está bien remunerado. Sin embargo, tenga cuidado, porque parece que el tiempo de la Diputación, que está en manos del PSOE, está llegando a su fin. Me gustaría saber qué piensa hacer al respecto.
Por favor, sea una buena persona y no mienta a la ciudadanía. Peñarroya-Pueblonuevo merece un liderazgo honesto y comprometido con el bienestar de sus habitantes. Espero que reflexione sobre sus acciones y tome decisiones que beneficien verdaderamente a nuestra ciudad.

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