A mi no me podrán catalogar de izquierdas ni de derechas, me califico yo mismo y con propiedad, progresista y liberal, pero sobre todo demócrata. Cuando una administración pública se gobierna a golpe de carnet político es lo menos democrático que se pueda imaginar un ciudadano de bien. Es muy importante la calidad democrática para seguir siendo un pueblo soberano. Si ha cambiado el color político en la Junta de Andalucía después de haber sido propietarios de ella un grupo de corruptos más de tres décadas, por qué no puede ocurrir lo mismo en la provincia de Córdoba? su Diputación,sus empresas públicas, como por ejemplo Emproacsa o Aguas de Córdoba, todos sus puestos de trabajo fabricados a dedo son la administración. A mi me da igual que la Diputación sea azul, morada, amarillo o rojo oscuro, sin embargo, después de tantas décadas de un rojo llamativo es una pena que no se avance teniendo como tenemos un despoblamiento casi récord en toda la UE. Los pueblos se engrandecen según su soberanía popular, y si no evolucionan es que una mano negra las retrasa, las asfixian y se muere. La comarca del Guadiato y sus municipios lo necesita, no morirse, sino salir adelante, y no hay otra que votar a otros y no a los mismos. Es mi humilde opinión del que seguro alguno no le interesará leer, más aún con las próximas elecciones donde se eligen a los diputados de la Diputación de Córdoba que tanto nos afecta en nuestra vida diaria. Lo que importa es el interés general, lo que prima, y no el carnet de un partido del que viven unos cuantos privilegiados.

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