Son ya muchos años, que desde muy pequeñitos nos juntábamos para jugar al deporte del balompié, a él le gustaba jugar de portero y siempre hacia equipo, su carácter amigable siempre lo llevó en sus genes, y así lo marca y lo sigue marcando, ya que después de muchos años, su sonrisa es las misma, sus atenciones y su forma de conectar con los suyos, es idéntica, sus genes han ido evolucionando y adaptándose a los tiempos, estos tiempos nuevos, que hacen que él siga intacto en toda su fisonomía y su sonrisa cada vez mas cercana.

FRANCISCO LUIS RODRÍGUEZ, es un referente musical de nuestro grupo de amigos, ya hace muchísimos años que tuvo que emigrar como el resto de muchos belmezanos, buscando ese trabajo, ese sustento que en aquellos años, se necesitaba para tener una formación adecuada, en nuestra zona los continuos cierres de los centros de trabajo, hizo que mucha población, saliera de sus casas, de sus domicilios de este pueblo al que siempre hemos llevado en el corazón y salir, corría la década de los sesenta-setenta, años complicados, la Sociedad de Peñarroya España, S.A. ,ya había desmantelado muchos centros de trabajo, trasladándose a Cartagena y al pueblo de la Unión- Murcia, donde algunos peñarriblenses y belmezanos se trasladaron junto con la mencionada empresa, en esta zona en ese año 1961, llega la empresa Nacional Carbonífera del Sur, dependiente del Instituto Nacional de Industria, bajo la presidencia de D. José Solís Ruiz, y siguió el trabajo en la cuenca minera, de una manera mas actual.
Esto ya había motivado esas expediciones de muchas personas a países de Europa, Alemania, Francia, Bélgica, y ese éxodo por las provincias españolas, algunos llegaron a Barcelona, lugar elegido para este gran amigo, Francisco Luis, este rockero que ama esa música, que se identifica con ella, que la engrandece y que la sabe dignificar, su vida sin ella, sería complicado, sus manos siempre las tiene abiertas para cualquier persona de su pueblo, sigue haciendo pueblo, es muy competente, y ama, si, ama a su pueblo y gente de una manera descomunal, su sonrisa esa de la que ya he comentado, sigue muy viva, ese espacio de la “carza”, ese lugar familiar, lo lleva en el corazón, Barcelona, esa ciudad donde echó sus raíces, le abrió las puertas y él se siente muy agradecido, también le ha devuelto con su trabajo, todo ese agradecimiento de esa llegada de emigrado, Francisco Luis, nunca dejó de acordarse de esas calles blancas de su pueblo, de sus amigos, de su Virgen de los Remedios, a su mujer e hijo le inculco con todo su cariño, lo que era ese referente nuestro, ese lugar en el Valle del Guadiato en el mismo corazón de esta maravillosa comarca, y lo sigue haciendo día a día, este sentimiento hacia su tierra, le nace muy adentro del corazón, siente por su poros a Belmez continuamente y a lo largo del año, aparece por estos rincones belmezanos, respirando jovialidad, sinceridad, compromiso y mucha música ambiental que a él le gusta escuchar en esas tardes noches de nuestro “Desafinado”, querido amigo Francisco Luis, yo de mayor quiero ser como tú, te admiro mucho, te quiero mucho y una de las muchas alegrías de mi vida, es tenerte como amigo, esto no tiene precio, son muchos años los que han pasado, pero nuestra amistad sincera, aquella que en aquellos domingos del parque nuestro, observamos a nuestra bande de música desde lo mas alto de ese kiosco de los músicos, mientras mirábamos a nuestro alrededor, a esas guapas belmezanas que paseaban por esos pasillos de ese parque genial, del que tanto disfrutábamos, ya termino, pero antes quiero decirte, que me siento muy orgulloso de la siempre sincera amistad que nos unió y que nos sigue uniendo de por vida, cuídate mucho, Belmez te necesita, y tus amigos también.
Desde esta ciudad de Madrid, un abrazo enorme colega.

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