13 de febrero de 2017 | Daniel Solano Sújar
Cuanta alegría repartió
Cuanta alegría repartió
Que duro es a veces asimilar la perdida de una amiga y si además es de esa clase de persona que siempre estuvo a tu lado y el vernos a lo largo de los años ya emigrados ,es como si el tiempo nunca hubiera pasado, que alegría me daba al verla por nuestras y suyas calles belmezanas, siempre con amigos, siempre intentando que todo fuera mejor y mejor, ella es un símbolo de cómo hay que querer a nuestras raíces, nunca perdió su acento, vivió algún tiempo en Puente de García Rodríguez, allí estaba destinado su marido Bucharaga, en esa mina a cielo abierto, ahí estuvo algunos años y como no podía ser de otra forma, siempre estaba con sus paisanos que también estaban destinados en esa mina.
MARIBEL MORENO CÁCERES, se nos ha ido, su lucha constante con esa maldita enfermedad era todo un ejemplo, con que dignidad la llevaba, y en mente siempre estuvo este bello rincón de su pueblo, en ese lugar mencionado anteriormente y en Coruña, todas las personas que se relacionaban con ella y su marido, sabían de donde era, sinceramente era esa clase de persona cercana y agradable, y sus momentos de juventud de ese colegio de las monjas, de esa pandilla, ella era la persona que siempre aconsejaba a todas sus amigas, el mundo de su pueblo lo llevaba con un orgullo tremendo, cuantas reuniones de baile con ella, su carácter agradable y siempre atento a todo el mundo, cuanto le gustaba bailar en su feria, en estos últimos años, cuanto disfruto junto a sus amigos y amigas, le encantaba de siempre nuestros grupos musicales, Veloces e Imperiales, era un fans de ella a tope y la verdad con un espíritu arrollador incansable, su feria de Belmez ,era parte y punto de ser feliz nunca se cansaba, una fuerza interior tremenda y se apenaba cuando ya veía que la feria iba camino de terminar, he tenido la gran oportunidad de ser su amigo durante toda mi vida y siempre la quise con toda mi alma, como yo muchos y muchas más, ella era un referente de sosiego, dulzura, y arraigo a sus raíces y sus amigas y amigos los respetaba con un dignidad tremenda.
Sé que la vida golpea de esta forma cruel y a veces para todos es muy difícil asimilarlo, sé que esa feria ya no será lo mismo, también sé que desde ahí arriba nos estarás protegiendo y querrá que sigamos disfrutando de esa feria y de esos lugares que ella tanto quiso, desde aquí amiga, te decimos tus amigos y amigas, siempre te llevaremos en nuestro corazón y que nos sentimos muy orgullosos de haber podido disfrutar todo ese tiempo junto a ti, Maribel eres y serás de por vida parte importante en todos nosotros y desde estas líneas le decimos a su esposo y gran marido y padre Bucharaga y a sus hijos, y a su hermano Pepe, sentiros muy orgulloso de ella, sólo dejó siempre amor y cariño para todos.
Belmez, está triste, suena sus campanas a duelo ,se nos ha ido una gran mujer y una gran madre y una amiga inolvidable D.E.P.
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