A cuántos de esos jugadores hemos visto, desde el minuto uno, totalmente concentrado en esos noventa y algo de minutos que dura un partido de fútbol, saltar al campo con sólo una idea en su cabeza ganar y ganar, desde su posición en el campo, hacerse líder ,mandar, corregir, trabajar, luchar y como no podía ser de otra forma, dejar claro quién manda en esa parcela, estos futbolistas siempre son muy apreciados por sus entrenadores y a la vez, sin querer se hacen referentes en el campo y trasladan una cantidad de energía positiva a sus compañeros, transmitiéndoles esas ganas de ganar, y eso se agradece en esas gradas, y la verdad uno al ver esa entrega desmesurada, en pro de esos nuestros colores, que feliz te sientes, porque en el fútbol, te ganan, pero lo que nunca puedes perder es que tú, no te entregues a la primera y no luches en esos minutos de juego, aunque el rival por categoría de sus jugadores, te puedan ganar, porque son un gran equipo y con un alto nivel económico en cuanto a sus presupuestos, eso lo vivimos en esa gran categoría que tuvimos la gran suerte de participar, esa primera andaluza, esos grandes campos de fútbol de esos grandes pueblos, de la provincia de Sevilla y Córdoba y que nuestro Recreativo Belmezano, estuvo ahí, dejando ese gran sabor futbolístico, eso fue lo más importante, el fútbol belmezano ese año estuvo ahí, en esa categoría y eso queda para la historia deportiva de este equipo que tanto queremos.

Hoy traigo a este apartado a esa clase de jugador, que como decía en el enunciado de este escrito, que es de nacimiento un ganador en todas las facetas, lo mismo era en el fútbol, que en el futbito, ahí dejaba claro sus intenciones, en la categoría antes mencionada, esa primera andaluza, en ese centro del campo, su conexión con este otro gran jugador, PAQUICO, era exquisita, como se entendían los dos, la verdad cuando frente a ti, tienes a esos grandes jugadores semiprofesionales, que viven de esto, que cobran grandes fichas, que son muy expertos por esa larga trayectoria, el competir con ellos es muy complicado, pero amigo, ahí estaba este jugador de nuestro Recre, que nunca se arrugó en ningún estadio, FRANCISCO RODRÍGUEZ ESQUINAS, futbolísticamente conocido como PAQUITO, que sabiduría empleaba en ese centro del campo ,que dominio de ambas piernas, como sabía situarse, y como robaba y entregaba esa pelota al mejor jugador situado, los kilómetros que podía hacer en un partido, esas siempre ganas de ganar ,y ese espíritu de sacrificio enorme, que bien lo hizo en esa categoría, pudo jugar en cualquiera de los equipo punteros de esos pueblos, y que confianza se crea a su alrededor, ante sus compañeros, PAQUITO, nació futbolista y en cada partido lo dejaba, muy claro, de verdad que alegría me da, y siento, cuando estoy escribiendo bajo mi punto de vista personal, y hago la valoración, sobre el juego de ellos, bajo mi óptica, esto no quiere decir, que cada uno tiene su forma de ver el fútbol, si sé que cuando hago la valoración, quizá sea muy apasionado, y más si es sobre esa semilla de jugadores que tuvieron la gran suerte de vestir esos colores que amo, esa blanca y azul que siempre llevo en mi corazón.
Pero bueno, esto no es ápice, para dejar de reconocer lo que mis ojos han visto, y la verdad no necesito ver mucho fútbol para detectar lo que es bueno, y en este caso, PAQUITO, hacer honor a ese pedazo de jugador que todo entrenador, quiere tener, que su técnica y su juego está justamente valorado, y que su fútbol dejó grandes destellos de un jugador enorme, entregado y activo, siempre a pesar de esa gran timidez que tiene.
Ya para terminar, sólo me queda decirte amigo PAQUITO, que fue un placer verte vestido con la camiseta de nuestro RECRE, y muchas gracias por todo lo que nos diste.

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