El tiempo pasa muy rápido y parece que cuando uno va a entrar en su local, te va a recibir como él sólo lo sabía hacer, ese gesto serio ,ese semblante, y bueno esa forma de atender, que hacía que todos pasáramos por su local, en su mirada esa sonrisa y ese talante, que a veces era muy sorprendente, una persona muy grande, y comprometida con su clientela, esa que nunca dejaba de estar ahí el, MANUEL GUILLEN, nuestro MANOLO, que siempre ponderaba y alababa mucho el esfuerzo de las costaleros y costaleras al hacer ese encuentro frente a su bar, las lágrimas que le salía al verlas en plena acción y lo que disfrutaba con esos actos de semana santa, nunca olvidaré cuando en una ocasión, tuvo esa oportunidad de ir a Madrid a ver un partido de fútbol del Real Madrid, fueron dos autobuses y primero visitamos la antigua ciudad deportiva, presenciando un partido del Castilla, pasando por el tour del Bernabéu y por la tarde ver el partido del Madrid, eso siempre lo comentaba en esas tertulias que hacíamos a veces en su bar, en esas largas mediodías y que siempre fueron parte muy importante de unión y amistad entre todos.
Manolo, era esa clase de persona, que enseguida te conectabas con él, muy listo, sabía que su forma de ser y de tratar a los clientes, era muy peculiar, y eso atraía mas y mas a su clientela, de verdad, tenía un corazón grandísimo, y si alguien no le podía pagar en su momento, él le daba cancha y con mucho respeto, no exento de cariño, para que la citada persona no se quedara fuera de su hábitat, estuviera feliz, esto para mí y como lo pude ver en directo, cuando he viajado a mi pueblo, me decía de la dimensión del buen corazón de este pedazo de pacense, que hoy estaría disfrutando y muy orgulloso, de ver al equipo de su pueblo, el C.D. AZUAGA, dirigido por el belmezano Antonio Jesús Cobos Ríos, Manolo, se sentiría muy feliz, ya que siempre conectó con todos los belmezanos y era un belmezano mas, y eso lo sabemos muchos, él también ayudó al Recreativo Belmezano, donando y organizando fiestas de ayudas para nuestro equipo, aparte de regalo de camisetas con el logotipo Mesón Victoria, detalles que dice de lo espléndido que era, ante cualquier petición que se le formulara, por parte de asociaciones locales.
Han pasado ya unos años, el otro día lo comentaba con su hijo Víctor, y aún nos cuesta mucho entender el no verlo, cada vez que paso a este gran local, la figura de la persona de Manolo, la tengo presente, manolo, dejó una gran impronta en todo el pueblo de Belmez, se hizo con el cariño de todos sus clientes y siempre lo vamos a recordar con el aprecio y cariño que él se merecía.
Son duros momentos, para los que tuvimos esa gran oportunidad de conocerlo y tratarlo, esa noticia triste que nos llegó en aquél momento, me rompió el corazón y sentí en mi alma como se me abría de dolor desde lo más profundo, esto nos pasó a todos los que nos sentimos en algún momento, como amigo suyo, y sé que en su maravillosa familia, su mujer y su hijo lo veneran cada día y el recuerdo es constante por parte de todos ellos y de todos como he dicho fuimos parte de su vida, como clientes y amigos.
MANOLO, SIEMPRE SERÁ RECORDADO Y NUNCA DEJARÁ DE ESTAR EN LA MENTE DE TODOS LOS QUE LO QUERÍAMOS Y ÉRAMOS MUCHOS, d.e.p., amigo Manolo.

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