El cielo belmezano se ha quedado oscuro, la claridad de día ha bajado muy rápido, las campanas de la Iglesia tocan a duelo, la tristeza invade los domicilios de los belmezanos, de nuevo esa noticia triste nos conmueve, se nos fue un verdadero amigo, una persona increíblemente sencilla, humilde, amable, cariñosa y de verdad siempre tenía una sonrisa para todos, aparte de una educación que siempre mostraba a todo el mundo, y eso lo sabemos los que hemos tenido esa gran oportunidad de tratarlo, ahora mismo me estoy acordando de cómo sentía los colores de nuestro Recreativo Belmezano, ahí dejo un empatía y una impronta muy difícil de olvidar, esa camiseta para él era un emblema de cómo había que defender a un pueblo a través del deporte y eso lo tenía muy claro, se que siempre fue muy feliz los años que disfruto como jugador y la verdad lo sentimos todos muy cerca, su Recre, era muy especial para él, por mi vida deportiva, milite en varios equipos y tuve a grandes entrenadores, que me enseñaron bastante sobre este deporte del fútbol, pero tengo que decir con toda humildad, que lo que yo pude presenciar, en esas casetas del estadio Juan Cortés, cuando MANUEL ESQUINAS ORTEGA, era el entrenador del Recre, nunca lo viví en ninguna otra parte, la forma de dirigirse a sus jugadores, la forma que le enseñaba las técnicas y estrategias a emplear en el terreno de juego, la humildad como lo contaba era digno de presenciar su humildad grandísima y su cariño hacia sus jugadores de matrícula de honor.
La verdad que los valores humanos de este buen belmezano eran muy grandes, eso lo saben sus amigos y familia, ahora no hago nada más que acordarme de los muchos amigos que lo están pasando muy mal ante esta noticia dolorosa, son muchos, pero tengo algunos en especial que se que sus ojos estarán llenos de lágrimas, algunos como Fernando Quintana, Antonio Haba, Luis Muñoz, nuestro querido Presidente, José Antonio Cano y bueno muchos más, muchísimos más, hombres y mujeres que han sentido mucho su perdida, un hombre que como he dicho siempre tenía sus manos abiertas para todo el mundo y una palabra y una sonrisa de gran persona y excelente amigo, bonita palabra cuando es de verdad, y en este caso era autentica.
Son tantos los momentos vividos últimamente en su lugar de trabajo, en ese Hogar, donde siempre estaba pendiente de todo el mundo , donde tenía esa forma inigualable de un trato exquisito, hace uno meses, yo sabía que MANOLO era un gran aficionado del Atlético de Madrid, y en una de mis visitas a BELMEZ, le conseguí una camiseta firmada por el capitán GABI, y al dársela en el hogar, su cara le cambio y su alegría fue muy manifiesta, y me lo agradeció en el alma, de verdad, él se merecía este pequeño detalle por todo lo mucho que siempre nos regaló a todos diariamente, y la verdad que los dos disfrutamos y mucho ese día.
En estos durísimos momentos ante este trance tan triste decirle a su mujer Maricarmen y a sus hijas, que tu marido, vuestro padre, hermano e hijo era una persona de la que muchos deberíamos aprender por su siempre buena disposición hacia los demás, por ser esa persona sencilla y muy amiga de sus amigos y amigas, y por dignificar esos valores que él ofrecía a diario a todo el mundo, siempre tendré en mis recuerdos a esta buena persona y darle las gracias a Dios, por permitirme haberlo tratado con el cariño y el respeto que siempre se mereció
En mi corazón siempre estarás MANOLO…SIEMPRE...SIEMPRE. D.E.P.

---

<< Volver a Daniel Solano Sújar