De nuevo volvemos a estar con toda alegría para hacerle un reconocimiento a esa clase de persona que siempre ha estado ahí, sintiéndose feliz de haber nacido bajo ese cielo azul transparente de ese pueblo blanco llamado Belmez, pueblo que siempre lo llevo en su corazón allá por donde estuvo, con motivo de esa larga vida laboral que le hizo ser un persona muy responsable por los cargos que llegó a ocupar.
Francisco Ramírez Caballero, hijo de Manuel Ramírez y de Dolores Caballero, nació en BELMEZ, tiene dos hermanos, Manolo y José, y son personas muy arraigadas a su pueblo de toda la vida, Francisco vivió en varias calles de nuestro pueblo, calle Castillo, Nueva , Montadero y finalmente en la calle Vinculo, Francisco vivió esa gran etapa de joven en nuestro pueblo donde se divirtió como todo joven, empezó a trabajar con los Alcántaras, y con ellos y con D. Hilario Urgal persona muy importante en el fútbol local de aquella época, estuvo controlando a los trabajadores que acudían a as campo de fútbol de nuestro pueblo a las obras de cerramiento del estadio, tapias, asientos y otros servicios para ese estadio, Francisco controlaba los jornales de las personas que allí trabajaban y fue unos de los primeros que vio ese estadio belmezano completamente cerrado y óptimo para jugar en aquella regional provincial.
Más tarde ingresa en la Sociedad Minera, Metalúrgica de Peñarroya, trabajando como empleado durante unos quince años, dejando una impronta entre sus jefes y personas allegadas a su empleo. Tengo que decir que Francisco con sus padres y hermanos debido a la guerra civil se traslada a la ciudad de Barcelona, con sus padres y hermanos, por periodos de meses vivió en Gerona, Lérida y en los pirineos, pasando a Francia en tiempos muy difíciles ya que les toco vivir de cerca la segunda guerra mundial, días muy complicados y temerosos por lo que ello conllevaba.
Pasado un tiempo como decía se coloca de administrativo en la S.M.M.P. estando unos quince años, de allí paso a la empresa de la Junta de Energía Nuclear, hoy llamada Enresa, llevando el departamento de Personal en el servicio del Cabril, pasando por varios centros de trabajo Cardeña, y otros terminando en las oficinas centrales de la Junta de Energía Nuclear en Madrid, responsabilizándose del departamento de la jefatura de personal, cargo que ocupó hasta su jubilación, Francisco fue una persona importante en el engranaje administrativo de dicha empresa, y la verdad que fue un hombre muy importante para muchos belmezanos y peñarriblenses que gracias a él pudieron trabajar en la mencionada empresa por su admirable gestión, de verdad esto es digno de agradecer ,siempre miro por su pueblo y por sus gentes, siendo esa persona cercana que ayudó de corazón a muchas personas.
Francisco Ramírez se casó con una gran belmezana, Anita ya tristemente fallecida esa gran compañera de viaje que le dio tres hijos y le dio esa felicidad matrimonial que ambos se merecían, mujer de grandes arraigo a su tierra y familia.
Francisco en el año 1977 después de varias reuniones funda la familia belmezana de Madrid, junto con otros buenos belmezanos Juan Peñalta, Saturnino Calvo de Mora, Eduardo Infante y muchos más, su labor exquisita, la lucha continua por engrandecer a esta asociación fue continua, fue Presidente de la misma, como también fue creo, Presidente de la casa de Córdoba en Madrid, durante su etapa de la directiva de la Gran Familia Belmezana de Madrid, consiguieron unos fondos muy importantes para la Residencia de ancianos de BELMEZ, nuestra Señora de los Remedios, donde gracias a las buenas relaciones con el SR. CASTUERA, persona con un alto cargo en el Ministerio de la Seguridad Social, y que gracias a su gestión se consiguieron los mencionados fondos para la que hoy es realidad, esa residencia muy querida en la calle Córdoba de ese pueblo blanco.
Podíamos hablar largo y tendido del trabajo altruista de esta persona ya NONAGENARIA, y que ayer de nuevo estuvo con sus paisanos en la Casa de Córdoba, casa de la que también dejo esa huella imborrable de un super trabajo eficaz y que hoy es un centro muy importante en la vida cotidiana de Madrid, su gestión en ese cargo de Presidente fue muy acertado y con mucha sapiencia.
Ayer Francisco se le notaba muy contento de nuevo la gente de su pueblo seguía al frente de esa Asociación Belmezana que él fundó y que sigue conservándose en esta ciudad después treinta y ocho años desde su fundación.
Es para mí un verdadero honor el poder trasladar esta historia de la vida de un buen belmezano que a pesar de su ya avanzada edad, aún sigue con ese cariño a los suyos y a su pueblo de verdad personas así hacen grandes a los pueblos donde nacieron y Francisco Ramírez, se puede sentirse orgulloso de eso, felicidades a sus hijas/hijo D.E.P por los padres que tuviste, con todo mi respeto y admiración, un abrazo fortísimo Francisco.

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