17 de enero de 2015 | Daniel Solano Sújar
Manuel Gallardo, un gran profesional
GRACIAS A ESTE MEDIO PODEMOS DARLE ESE PEQUEÑO HOMENAJE EN RECONOCIMIENTO A SU VIDA LABORAL
Nunca dejaré de agradecer la gran disposición y la gran profesionalidad de este belmezano, Manuel Gallardo, en la labor diaria en su puesto de trabajo en la estación de servicio la Parada Belmezana S.L., en toda vida laboral hay días buenos y menos buenos, son cuarenta años en ese espacio y siempre con la misma sonrisa y ese saludo al verte y como no puede ser de otra forma intentado que todos sus conciudadanos y personas que acuden a este servicio se vaya con la tranquilidad que el servicio prestado haya sido de toda garantía.
Manuel Gallardo, es superconocido en nuestro pueblo en Belmez, un hombre muy trabajador y emprendedor, en tiempos tuvo un local de ventas de artículos para la caza, Armería los Remedios, amante de la caza y del deporte de tiro al plato, donde dejó una gran experiencia en su participación en torneos, donde recibió importantes premios, como he dicho un hombre muy trabajador desde pequeñito, hizo de todo, trabajo también con una calidad importante en el servicio de hostelería, manejándose muy bien entre esas mesas y ese restaurante en eventos importantes de bodas, comuniones y otras reuniones, una persona siempre muy cercana y eficaz en todo su relación con el puesto desarrollado.
Gracias a este medio de comunicación podemos darle ese pequeño homenaje en reconocimiento a su ya comentada vida laboral, para los que hemos visto todo su desarrollo, nos quitamos el sombrero ante tanta calidad humana de esta gran persona, decía al principio de este escrito que hubo días buenos y menos buenos, pero en todos esos días jamás le notabas algo en referencia a la dejadez en la prestación del servicio a sus clientes, decir que algunas veces por no decir muchas, una vez cerrado esas doce horas de trabajo y llegando a su casa a descansar ese teléfono ha sonado a ciertas horas no recomendadas y ante esa llamada de urgencia y de necesidad primaria, Manolo se levantaba y acudía a su lugar de trabajo para poder solucionarle ese problema que se presentaba a cualquier belmezano, belmezana y personas que necesitaban con urgencias ese servicio.
Del amigo MANOLO, podemos escribir largo y tendido, es un libro abierto de todo lo relacionado con Belmez, ahí en ese lugar de trabajo su sonrisa en perenne, su amabilidad constante, esa parada de la calle Trajano la vio y la vivió vestirse de luces, el bar lo inauguró él, y buenos ratos que echó con su amigo y celebre persona Alfonso Domínguez, y hoy en la actualidad del amigo Rafa, son como he dicho muchos años, muchísimos ayudando a mucha gente, la vida a veces nos es muy boyante para todos y ahí este buen hombre sabia que tenía que estar al lado de aquellos que iban saliendo poco a poco, de esa penumbra como es la falta de trabajo,se que a nadie dijo no, cuando solicitaban su ayuda, y la verdad el corazón de este pedazo de belmezano le podía ante esas situaciones límites, de nuevo por ti me quito el sombrero Manolo.
Un hombre cercano, dicharachero, amigo de sus amigos, su “barsa”, y su Córdoba que no se lo toque nadie, pero tiene un cariño enorme por ese equipo que viste de blanco y azul, ese equipo que representa a su pueblo su Recre, ese lo lleva en el corazón grabado a fuego, y al nombrarlo se le llena la cara de alegría cuando recuerda a Pepe Dominguez, Del Rey, Antoñin Fernández, Chirri, Rivera, Camilo, Isidoro y otros, el fútbol es su pasión, y le gusta comentarlo con sus amigos, no puedo dejar de decir que es un excelente jugador de dominó y lo demuestra cuando en esos campeonatos del 1º de Mayo, que organiza la Agrupación Socialista de Belmez llegando siempre a las finales.
Manuel Gallardo, hizo un dueto con otro gran belmezano que fue compañero suyo durante bastantes años Paco Tamayo en ese mencionada Gasolinera y que dejo una gran impronta en su jubilación, y ahora que ya está llegando el fin de su carrera de trabajo laboral, decirte amigo Manolo, que siempre fue un honor llegar a esa gasolinera en mis múltiples viajes a mi querido pueblo y tener esa gran oportunidad de repostar antes de salir para mi destino Madrid, después de pasar unos días junto a mis paisanos y amigos y siempre me decías y dices...Dani con cuidaito despacio...Vuelve que te quiero…, gracias Don Manuel Gallardo, gracias de todo corazón.