29 de julio de 2013 | Daniel Solano Sújar
El Graduado (Avda. de la Constitución)
De verdad al nombrar esta frase, uno no puede dejar de pensar en aquella película de los años setenta, donde el cine era parte muy importante de la formación de muchas personas, siempre he dicho que la música, el deporte, las comunicaciones y el séptimo arte ha sido un compendio muy importante en el ámbito de las personas, esta película dejó una huella imborrable en el cinelóide y Dustin Hofman, estuvo genial en esa aparición en las pantallas de los cines de estreno de este país.
Bueno, cuando alguien apuesta por su pueblo, y mas aún en estos momentos tan difíciles que vivimos, mi apoyo será siempre incondicional, la crisis que lleva ya seis o siete años apretando hasta el infinito, donde nuestros jóvenes tienen que emigrar ,donde las posibilidades son muy precarias, y las ayudas se han cortado de raíz, donde estos políticos que nos gobiernan sólo saben nada mas que robar y robar, donde ese lacra pasa de un partido a otro y esto no para, no me gusta generalizar, pero la situación es tan difícil
que uno ya no sabe que decir, sólo deseo que este final agónico cese y esos padres de familias tengan esa oportunidad de encontrar ese trabajo deseado.
Por esto, me produce mucha alegría esa nueva instalación de ese nuevo local de copas, ese bar llamado el Graduado, donde será de nuevo otro lugar de esparcimiento y relax dentro de un ambiente agradable, espero y le deseo a mi amigo PACO PORRAS FERNÁNDEZ, que tenga ese éxito esperado, seguro que lo tendrá, esta sensación también la traslado a los demás bares de nuestro pueblo, ya que ellos también apostaron por un futuro mejor.
En la foto que envío para ilustrar este comentario para el periódico que colaboro, se ve una ventana abierta, que será sin duda la ventana de la esperanza, una cerveza bien despachada con esa espuma que a mi que soy un enamorado de la cerveza me agrada mucho, una buena tertulia entre dos personas a las que adoro desde hace muchos años, y a los que tengo por amigos de verdad, Rafael Rivera y
Santiago Algaba y a la que me podré unir en mi próxima visita a mi pueblo y compartir con ellos y disfrutar de tu local Paco, al que le deseo lo mejor, se que tú estarás siempre ahí en esa lucha de mantener lo conseguido, la hostelería es un digno trabajo que dignifica mucho a las personas que trabajan con el cariño, la mesura y el respeto por el cliente, esto es sinónimo de éxito seguro y con ese nombre, al que todos recordamos como un éxito de juventud, buena suerte y gracias por elegir esa zona de nuestro pueblo donde desde pequeño compartí momentos irrenunciables en ese local, junto a Francisco Cerrato y su mujer Antonia, que también desde detrás de aquella ventana a la que ella se asomaba para compartir trabajos junto a su marido, momentos que nunca olvidé.
Termino, diciéndote que te deseo lo mejor porque como decía al principio, mi enhorabuena por esa apuesta por tu pueblo, y ya sólo me queda decirte mucha suerte AMIGO PACO.