16 de diciembre de 2022 | Daniel Solano Sújar
La educación y la docencia juntas en ese periodo inolvidable de trabajo
Un comportamiento siempre que deja huella de ser una gran persona
La vida profesional y humana, es siempre un punto de reflexión importante en ese estado de saber compaginar la vida social y la vida docente, un tiempo que dice mucho de esa sapiencia que en el día a día es muy importante en el estudio y formación de todos esos jóvenes que pasan por sus clases y en ellas aprenden a desarrollarse para la vida, que es ese punto de partida para la vida nueva que empieza una vez acabado esos estudios de formación y se preparan para entablar nuevas actividades empresariales y llegar con ese coeficiente suficiente para sentirse muy orgullosos de ello.
Desde estas líneas de trabajo y abnegación escrupulosa, es sentirse profesor, Maestro. Maestra, en una palabra docente, y en este caso quiero felicitar a ese grupo de personas que llevan y llevaron toda su vida, en esta materia de enseñanza y que aportaron un servicio ejemplar para nuestro país.
Hoy quiero darle la enhorabuena a una mujer docente que en todos esos años, que estuvo ejerciendo, dejo patente su calidad profesional en ese tiempo y desde estas líneas, le doy mi más sincero reconocimiento por esa gran labor y que hizo de ella, esa gran mujer, esa gran madre y esa mujer que siempre tiene esas bonitas palabras de agradecimiento a todos sus compañeros y compañeras en esa etapa que la marcaron y que siempre las tiene en su recuerdo..
Felicia López de Lerma y Pérez de Gracia, ya prejubilada por asuntos médicos, es esa persona que junto con todo ese grupo de docentes, se merecen el mayor de los reconocimientos a todos los niveles, su integración y su entrega en todo ese servicio de enseñanza, parte fundamental para esa formación de tantos y tantos jóvenes, que al terminar esa etapa de estudios, quedan preparados para lo que les guarda la vida social y laboral y puedan afrontar ese nueva iniciativa de ese nuevo trabajo y estén a la altura de ese puesto refrendado.
Reitero mi agradecimiento a Felicia López de Lerma y a todo ese enjambre de docentes que son parte importante en la vida social, laboral y cotidiana por esos trabajos de formación, para que nuestros jóvenes tengan esa oportunidad que todos se merecen gracias de todos corazón, amigos docentes.