11 de marzo de 2019 | Daniel Solano Sújar
La dignidad y el respeto por su profesión
Esa seriedad que confirma el amor a su trabajo
En la vida siempre es muy importante el ser esa persona constante, y segura en todo lo que te puede asegurar, el seguir aprendiendo y aprendiendo, siendo esa persona humilde y a la vez muy respetuosa en todo su ámbito laboral, valores que dignifican a las personas, y en este caso es de muy agradecer todo ese tiempo que le dedico a ese aprendizaje y el comportamiento durante toda esa fase se intentar conseguir ese trabajo y ese puesto en el mercado laboral y que hoy es muy reconocido, dentro de los niveles que dicha profesión demanda.
Hoy quiero con todo mi respeto y admiración dedicarle unas líneas llenas de cariño y mucho respeto hacia un buen belmezano, del que todos nos sentimos muy orgulloso de él, JOSÉ TABAS RIVERA, es el prototipo de esa persona estimable en el trato y con un gran gusto en las tareas de su trabajo, ese trabajo de estilista dentro de todo lo que significa ese centro, donde se plasma a diario las nuevas técnicas para mejorar todo lo relacionado en ese mundo de la belleza, José es muy atento y en el trato directo es una persona increíblemente sincera y hace que la clienta o el cliente se encuentre muy feliz en esas horas que pasan mejorando sus estilos y su forma de sentirse bien con uno mismo.
En este caso que me ocupa, tengo que decir, que cuando una persona siente en sus adentros ese trabajo, lo busca ,lo anhela y lo trabaja continuamente, nada es fácil, la vida es muy dura, hay que ser valientes y nunca bajar los brazos, esa constancia y esa entrega diaria y muchos días trabajando fuera del ambiente familiar, dejándote horas y horas el alma en ese aprendizaje, ante todo esto, sinceramente me quito el sombrero, personas así hacen muy grandes los locales donde suelen trabajar, y son meros transportadores de hacer felices a muchas personas que acuden a esos centros de belleza, donde se encuentran muy felices con el trato obtenido por parte de estos profesionales que en esos momentos los atienden.
Nuestro paisano JOSÉ TABAS, después de ese periplo por varias ciudades trabajando en este especialidad, tiene su sitio en esta ciudad de Madrid, en un ambiente muy acogedor, su forma de ser, ese cariño y respeto acompañado de esa gran humildad le hace ser ese gran profesional que todo el mundo le adora y quiere estar junto con él en esas sesiones que le hacen sentirse muy felices al terminar esas horas de embellecimiento y con el gusto y el trato exquisito que José demanda en sus jornadas de trabajo.
La vida te da esas satisfacciones, y a pesar de lo duro que es todo, si no eres un persona constante y crees en ti, nunca llegarás a la cima que uno se marca, y en esa caso, el trabajo, la humildad, el respeto y ese saber estar en todo momento, ha sido el galardón que hoy puede sentirte muy orgulloso de haberlo conseguido.
Desde Belmez, nos alegramos muchísimo que ese trabajo tuyo, sea ese punto de salida, de cómo hay que dignificar esa profesión, la cual tu lo haces a diario, grande muy grande este belmezano.