Uno mira para atrás y no para de recordar esta fecha inolvidable, esos sitios en esos locales de nuestros pueblos y comarca que se engalanaban para esa posible fiesta, esa noche donde todos juntos buscábamos, esa unión y mas de uno bailar y bailar junto a esa niña que tanto te gustaba, esos ratos con los tuyos, esos amigos que hoy gracias a Dios los sigue conservando, y como no puede ser de otra forma, seguimos y seguiremos recordando todos esos maravillosos momentos, ese baile, era muy importante, esos trajes largos de todas las mujeres, ese ambiente acogedor y esa inmensa alegría que se desbordaba al paso de la entrada del nuevo año, tiempos y tiempos que siguen vivos, hoy las formas han cambiado, los jóvenes disfruta de otra manera, la música es otra y los ambientes también, pero en lo principal sigue esa forma de vestirse para el otro, el estar bien, el que esta noche sea lo mas feliz del mundo, y que todos los sueños y esperanza se hagan realidad en ese año venidero.

Me gusta mucho que los jóvenes, sigan arraigados a sus costumbres, que todos ellos sientan en sus adentros esa felicidad que da la amistad, esa que hay que mantener todos los días del año, porque aunque no lo parezca, esta noche es una mas de esa unión que nacerá para siempre y eso como experiencia por mi parte, decir, que nunca olvidaré esas nocheviejas de mi pueblo en ese casino, en ese gran bar, y en otros lugares junto a familiares y amigos, eso se quedó muy vivo y a pesar de la distancia, todos los años las recuerdo con el cariño que todos esos momentos se merecen.

Han pasado muchos años, muchos amigos y amigas se nos fueron, pero su recuerdo y ese levantamiento de copa en la salud de todos y en especial por ese rincón, ese lugar blanco, que nos sigue dando la vida, ese referente que nos sigue guiando desde donde estemos, si,en ese lugar que todos tanto queremos y que tiene por nombre Belmez, ahí fui muy feliz y fuimos muy felices, en nuestro ya viejo corazón, están esas señales que nunca queremos borrar y que en estas fechas siguen aflorando de una manera brutal, ya que esas nocheviejas fueron parte de nuestras vidas, de nuestros noviazgos y de nuestros matrimonios, y ante esto, sólo hay una palabra, admiración.

Ya termino deseando que todos tengáis esa fiesta genial de nochevieja y que la disfrutéis como os la merecéis, y a los que estamos fuera de nuestro rincón belmezano, levantad la copa por por ese digno pueblo, y por sus gentes, que son los nuestros, FELIZ NOCHEVIEJA, para todos y que este año venidero, sea el preludio de un año aún mejor, desde esta ciudad de Madrid, un abrazo a mis paisanos y amigos de todo corazón.