6 de julio de 2016 | Daniel Solano Sújar
Cuando el alma se desgarra
D.E.P.MANUEL ACEDO BENÍTEZ
Hace apenas unas horas y aún con el corazón y el alma muy desgarrada ante la fatal noticia, que ayer corría como la pólvora de boca en boca, esa ambulancia recorriendo urgentemente las calles de Belmez, para llegar a ese domicilio después de la llamada y con el aliento y los nervios a flor de piel, los profesionales del medio, estuvieron atendiéndolo, pero la llama de la vida de este buen belmezano expiró de una forma brutal y se nos fue en silencio de la misma forma que vivió.
El vivía de joven con sus padres en la calle Paseo, muy cerquita del parque municipal, junto al colegio nuestra señora de los Remedios, hoy Instituto, ahí jugó con los chavales de la calle y con sus hermanos, se subía al icono de piedra de granito que estaba en la casa del Jardinero del Parque, cuanto jugó de pequeño en esos lares, una vida de un niño como otro cualquiera de otra
calle belmezana, me acuerdo cuando jugaba en el equipo del fútbol sala con aquello chavales, que lo hacían fenomenal, los lagartos de verdes, esa pista polideportiva se llenaba para verlos, nunca un mal gesto nunca un agravio hacia nadie, siempre competían con una deportividad digna de mencionar, corría el año 1986, de verdad esa fecha me trae recuerdos imborrables, fueron años importantes de unión de todos los que solíamos practicar este bello deporte y que hoy se sigue manteniendo unas lazos de amistad y que quedaron soldados de por vida, esto es la grandeza de todos los deportes, aunar y aunar esa es la base principal y el cometido de estos torneos.
En este equipo militaba MANUEL ACEDO BENITEZ, un belmezano, respetuoso con todo el mundo, tolerante y muy comprometido con el sentimiento de la amistad, que hoy en su óbito, acudieron a despedirlo como él se merecía, una persona que siempre estará en nuestras retinas toda la vida, su forma de ser quedó impregnada en todos los que tuvimos esa suerte de conocerlo y tratarlo algunos más íntimos que otros, pero, todos sus paisanos han sentido mucho esta pérdida de una persona, muy joven que aún lo necesitaba su mujer e hijos, sus hermanos, sus amigos y toda esa gran familia a la que pertenecía, ese apellido Acedo Benitez, es un claro referente de muchas familias belmezanas, un apellido con toda dignidad que le dio a su pueblo todo lo mejor de ellos siempre.
Hay momentos muy duros amigo Navarro, el poder rendirle homenaje a esta buena persona, que sólo en su vida, siempre intentó hacer lo mejor que él sabía, para todo el mundo, una persona muy comprometida en su vida laborar, en su vida cotidiana y en su vida familiar, de verdad estos momentos son muy difíciles de asimilar, se queda el alma vacía y no llegas a entender que en unos minutos se pueda acabar la vida de una persona, MANUEL, deja una gran impronta entre todas aquellas personas que vivieron su vida junto a él un recuerdo imborrable de la calidad de persona que fue, hoy en su homilía, se ha visto el cariño que sus paisanos le tenían, esa iglesia y esa plaza de la iglesia, llena de belmezanos y foráneos que no querían faltar a la cita de despedida de esta buen belmezano, ya descansa en la ladera de ese castillo al que él tanto quería, siempre lo recordaremos como él fue, esa persona amable, sencilla y muy familiar, amigos de sus amigos, y un padre que supo darle a su mujer e hijos lo mejor de él, este buen chaval que junto a sus hermanos recorrían ese parque, jugueteando, siempre estará en mi recuerdo y en el de sus amigos, y termino dándole el pésame con todo mi cariño a su mujer, e hijos, a sus hermanos RAFAEL Y ANTONIO, y a todos su familia belmezana que es muy grande y que siempre dignificaron ese apellido a lo largo de los años de residencia en Belmez, hoy de nuevo las campanas de nuestra Iglesia tocaba a duelo, era un sonido muy triste, se hizo un silencio que se nos desgarró el alma, a todos mi mas fuerte abrazo de todo corazón. D.E.P. MANUEL ACEDO BENÍTEZ.