10 de mayo de 2012 | Adalberto García-Donas León
Se les veía venir
AHORA YA NO HAY SOLUCIÓN Y TENDREMOS QUE ESTAR LOS ALGO MÁS DE TRES AÑOS QUE NOS QUEDAN DE GOBIERNO POPULAR
De un tiempo a esta parte, estamos viendo la realidad y las consecuencias del derroche a manos llenas de años anteriores de cierta clase política, en su mayoría, le pese a quien le pese, defendiendo las siglas del Partido Popular en la Comunidad de Madrid, en Castilla La Mancha, en Baleares, en el País Valenciano, etc., pero también los hemos visto en menor cuantía, a los del Partido Socialista en la Comunidad Andaluza, que sintiéndose intocables, han hecho obras faraónicas a su antojo o han participado en estafas millonarias para beneficio propio. Por este motivo, vemos estaciones ferroviarias fantasmas, como la que hicieron cerca de Guadalajara, trenes sin viajeros, aeropuertos sin aviones como el de Ciudad Real y Castellón, macro urbanizaciones vacías, autopistas casi sin coches, y así un largo etcétera, que unido a la usura y avaricia de los bancos, y a la especulación de los llamados “mercados”, como si detrás de ellos no hubiera personas sin escrúpulos con nombres y apellidos, nos ha llevado a la situación actual, con un gobierno de derechas haciendo todo lo contrario de lo que prometió y que tanto criticó del gobierno anterior. Es como si amparándose en la mayoría absoluta, que incomprensiblemente les otorgó un sector de los españoles, de forma consciente unos e inconsciente otros, han aprovechado la situación y han dado un golpe de estado en toda regla con su salvaje reforma laboral, contra el estado de derecho de los trabajadores y sus familias, llevándonos de un plumazo y sin máquina del tiempo aun inventada, a los primeros años del siglo pasado, donde nuestros abuelos carecían de los más elementales derechos en el trabajo, en la educación, en la sanidad, en las mejoras sociales, etc., y donde los sindicatos no pintaban, como suele decir, ni la O con un canuto.
Visto lo visto, que nadie ponga la escusa de no saber lo que iba a pasar, porque se les veía venir.
Ahora ya no hay solución y tendremos que estar los algo más de tres años que nos quedan de gobierno popular, “rezando” para que esto no vaya a más, esperando y deseando que recapaciten, y sobre todo, que busquen el consenso de todas las fuerzas políticas y sindicales, para que entre todos, acierten con la solución al problema, porque si no es así, corremos el riesgo que esto termine peor que en Grecia, o como decimos en España, como el rosario de la aurora…