12 de junio de 2014 | Samara García Guerrero. Área de Comunicación
Entrevista al doctor Manuel Copote sobre la importancia de la donación sanguínea
Cada 14 de junio se celebra el Día Mundial del Donante de Sangre, como muestra de reconocimiento y agradecimiento hacia los donantes de sangre de todo el mundo.
Con motivo de esta efeméride, el doctor Manuel Capote Martínez, Facultativo Especialista en Hematología y Hemoterapia del Hospital de Alta Resolución Valle del Guadiato, nos explica en esta entrevista la importancia de este gesto sencillo y altruista que cada día salva millones de vidas en todo el planeta, y que, a día de hoy, no puede sustituirse por ninguna otra fórmula alternativa, a pesar de los avances científicos.
1. ¿Qué es la sangre y de qué está compuesta?
La sangre es el fluido de la vida, es un tejido líquido que regula el transporte del oxígeno y transporta nutrientes y sustancias que combaten las enfermedades. Una persona adulta puede tener entre 4 y 6 litros de sangre, aproximadamente el 7% de su peso corporal.
La sangre está constituida por varios elementos con funciones diferentes:
Los glóbulos rojos, son las células sanguíneas más numerosas, cuyo característico color rojo se debe a una proteína que se halla en su interior llamada hemoglobina, responsable de transportar el oxígeno y de eliminar el dióxido de carbono. Su déficit (anemia) provoca una carencia de oxígeno en los órganos vitales de los enfermos. En su tratamiento se aplican concentrados de hematíes.
Los glóbulos blancos, o leucocitos, se encargan de proteger al organismo contra el ataque de bacterias, virus, hongos y parásitos.
Las plaquetas, o trombocitos, son las células sanguíneas más pequeñas. Intervienen en la coagulación de la sangre impidiendo las pequeñas hemorragias que se producen habitualmente en las arterias, venas y capilares. Su déficit (trombopenia), que es frecuente en enfermedades como la leucemia, o tras algunos tratamientos del cáncer, provoca la aparición de hemorragias graves. El tratamiento prioritario en estos casos es la transfusión de concentrados de plaquetas.
El plasma es la parte líquida de la sangre. Compuesto fundamentalmente de agua y proteínas, interviene en múltiples procesos metabólicos básicos para el organismo como la coagulación de la sangre, la inmunidad y el transporte de varias sustancias y medicamentos.
2.- Explíquenos la compatibilidad de los distintos grupos sanguíneos
No todos los productos derivados de la sangre se pueden transfundir a cualquier destinatario. La compatibilidad entre la sangre del donante y la del paciente es fundamental.
Un grupo sanguíneo es una forma de agrupar ciertas características de la sangre en base a la presencia o ausencia de determinadas moléculas, llamadas antígenos. Existen muchos grupos sanguíneos, pero entre todos ellos destacan por su importancia a la hora de la transfusión los grupos pertenecientes al sistema ABO (grupos A, B, AB y O) y Rh (positivo y negativo).
Al combinar estos dos sistemas podemos llegar a una clasificación más detallada de los diferentes tipos de sangre: A+, A-, B+, B-, AB+, AB-, O+ y O-. Algunos de estos grupos sanguíneos son más raros que otros. En la mayoría de los casos, los pacientes reciben sangre de su mismo grupo sanguíneo, sin embargo, las personas del grupo O-, puede donar sangre a cualquier persona, son "donantes universales". Del mismo modo, los individuos AB+ se denominan "receptores universales”.
En la siguiente tabla vemos resumida la compatibilidad de grupos:
Grupo A quién puede donar De quién puede recibir
A+ Puede donar a A+ y AB+ Puede recibir de A± y O±
A- Puede donar a A± y AB± Puede recibir de A- y O-
B+ Puede donar a B+ y AB+ Puede recibir de B± y O±
B- Puede donar a B± y AB± Puede recibir de B- y O-
AB+ Puede donar a AB+ Receptor universal
AB- Puede donar a AB± Puede recibir de A-, B-, AB- y O-
O+ Puede donar a A+, B+, AB+ y O+ Puede recibir de O±
O- Donante universal Puede recibir de O-
3.- ¿Es imprescindible la donación sanguínea para salvar las vidas de otras personas?
La sangre no puede fabricarse, a pesar de los avances científicos en la tecnología de recombinación genética para la producción de proteínas humanas, la única solución es que una persona quiera ceder una pequeña cantidad de su sangre, de manera voluntaria y altruista. El hecho de donar sangre comporta una actitud responsable y solidaria que hay que imitar.
Cada día decenas de pacientes en nuestros hospitales salvan su vida o recuperan su salud gracias a la transfusión de sangre y sus derivados.
Por ello no se trata de donar sangre solamente hoy, sino que es absolutamente imprescindible donar periódicamente. Se trata de convertir la donación en un hecho habitual, acudir cada 4 ó 6 meses a donar debería ser una cosa familiar para todos, haciendo entonces posible que las necesidades de sangre y derivados se cubran totalmente.
En la medicina moderna, los tratamientos de cáncer, la cirugía compleja, los accidentes de tráfico, los trasplantes de órganos, etc., todo sería imposible sin transfusiones, detrás de estos avances están miles de donantes anónimos que lo hacen posible.
4.- ¿Para qué se utilizan exactamente los componentes sanguíneos?
La sangre donada normalmente es separada en distintos productos, destinados a diferentes usos:
Los concentrados de hematíes se transfunden para corregir los síntomas y signos derivados de la falta de oxigenación de los tejidos que acompañan las anemias producidas por causas como las leucemias o los cánceres, que disminuyen la producción de glóbulos rojos en la médula ósea. También son necesarios en el tratamiento de las hemorragias de aquellos enfermos que padecen una anemia por sangrado intenso como los asociados a los traumatismos graves, hemorragias digestivas, intervenciones quirúrgicas, etc.
Las plaquetas se transfunden frecuentemente para prevenir hemorragias en pacientes que presentan un nivel bajo de plaquetas en la sangre, como los pacientes con cáncer o leucemia aguda en tratamiento con quimioterapia, o pacientes con enfermedades de médula ósea incapaces de producir plaquetas. También está indicado en pacientes con hemorragias graves espontáneas asociadas al mal funcionamiento de las plaquetas, como los niños que nacen con alteraciones hereditarias plaquetarias.
El plasma puede emplearse para el tratamiento de pacientes con carencia de factores de la coagulación y que sufren hemorragias graves, como es el caso de personas que sufren enfermedades del hígado.
5.- Por sintetizar ¿Cuáles son las principales razones para donar?
La donación es libre y altruista, no puede ser motivo de comercio. Ni se compra ni se vende. Por tanto, la iniciativa parte de ti, pero, por si tienes alguna duda, aquí te presentamos razones que pueden ayudarte a dar este pequeño paso solidario:
Con una donación, se salvan tres vidas.
La cantidad donada sólo representa el 10% de la sangre que normalmente se posee, porcentaje que no interfiere con el funcionamiento normal del organismo.
La donación de sangre se puede hacer a cualquier hora del día, sin necesidad de condiciones especiales.
Cada día 75 personas salvan su vida en España gracias a las transfusiones.
Los tratamientos de cáncer, la cirugía compleja, los accidentes de tráfico, los transplantes de órganos,... serían imposibles sin donaciones de sangre.
La sangre no puede fabricarse.
Si piensas donar cuando haya una emergencia, ya llegas tarde. Tu sangre debe ser sometida a pruebas y procesos. Por lo tanto, es mejor acudir antes de que aparezca la necesidad.
En verano, hace más falta, al contrario de lo que se cree, por el aumento de los accidentes y la escasez de donantes en sus residencias habituales.
Porque mañana, a lo mejor, le hace falta a uno de los tuyos.
6.- ¿Cómo sé si puedo ser donante de sangre?
En principio, puede ser donante de sangre si tiene entre 18 y 65 años, pesa más de 50 kilos y goza, en general, de buena salud.
Es preciso tener este peso mínimo, porque en cada donación se recoge una cantidad estándar para todos los donantes (450 ml).
Las mujeres pueden donar hasta 3 veces al año, 4 veces si eres hombre.
Entre cada donación de sangre deben transcurrir al menos dos meses.
No es preciso estar en ayunas para hacer una donación de sangre, incluso habiendo hecho una comida normal se puede donar sin problemas.
Puedes donar incluso aunque tengas el colesterol elevado o tomes alguno de los medicamentos más frecuentes.
En cualquier caso, tanto para la seguridad del donante como para la del receptor, previamente a la donación se debe contestar un cuestionario médico orientado a detectar cualquier posible factor de riesgo. Las preguntas de este documento vienen determinadas por ley y su objetivo es velar por la seguridad del donante y del futuro receptor.
*Fuente bibliográfica de la entrevista: Centro Regional de Trasfusión Sanguínea (CRTS).