La asociación Huellas Felices se encarga de la búsqueda de hogares para los animales abandonados, y lucha contra el maltrato y abandono de los mismos desde octubre del pasado año. Huellas Felices necesita socios, padrinos, y voluntarios para evitar un futuro catastrófico a las mascotas.
Marta Sánchez, una de las 10 personas que conforman la asociación sin ánimo de lucro, ha indicado que el objetivo prioritario es encontrar una familia que proporcione el cariño del que han sido privados los animales abandonados, y asegura que es alarmante el panorama actual que hay en la zona del Guadiato.
Estos 10 amantes de los canes y felinos se distribuyen las tareas de construcción de perreras o limpieza, el suministro de comida y agua a lo largo del día, de tal forma que siempre hay alguien en las instalaciones que poseen para las mascotas, realizándolo “a base de mucho esfuerzo” y al ser estudiantes o desempleados, el nivel adquisitivo que poseen es limitado aunque “el sacrificio económico se compensa con creces”.
Los “pequeños” que rescatan de las frías calles son atendidos para que puedan superar las carencias a nivel físico y psicológico, e intentan que olviden lo que han vivido anteriormente y sean felices “es increíble los cambios que dan y lo agradecidos que son”.
Aseguran que les gustaría disponer de la financiación suficiente para poder rescatar a todos los abandonados a los que la calle ha azotado con el paso del tiempo, pero como desgraciadamente eso no es así, recogen a los animales más necesitados, heridos, cachorros, o desnutridos, y cuando alguno es adoptado, su hueco es ocupado rápidamente por otro. Advierten que no son perrera, y que no acogen bajo ningún concepto a los que tienen dueño “que por su incoherencia e irresponsabilidad quieren abandonarlo”, de hecho “hemos denunciado más de un caso similar”.
A la hora de firmar la adopción, que ya han superado los cincuenta –contando los dos perros adoptados por dos de sus miembros-, se aseguran de que el animal va a estar en buenas manos, que lo cuidarán, querrán y respetarán “los adoptantes deben firmar un contrato en el que sus cláusulas nos autorizan a realizar cuántos seguimientos estimemos convenientes a fin de comprobar que está siendo bien tratado”, de no ser así “volverá con nosotros a la espera de encontrar una familia que sí sepa como hacerlo”.
En cuanto al precio de venta la respuesta es tajante por parte de todos los miembros “no comercializamos con los animales, pero sí cumplimos con unas obligaciones básicas como entregarlo con su chip, sus primeras vacunas y desparasitado” y éstos son los únicos gastos que se han de abonar.
Cuentan con la ayuda de la veterinaria Bárbara Gómez, a la que le agradecen su trabajo y colaboración. Y solicitan cualquier tipo de apoyo, a través e la cuenta BBK Bank CajaSur 2024 0052 30 3000158359, socio (4 euros al mes), padrino (10 euros mensuales) o cualquier donación. Asimismo aceptan comida, correas, juguetes, colchones… “cualquier ayuda, por pequeña que sea, para nosotros puede ser enorme”. Animan a todos los amantes de los animales a entrar en Facebook y Tuenti -REFUGIO HUELLAS FELICES-, en www.refugiohuellasfelices.com, o que se pongan en contacto con ellos a través de refugiohuellasfelices@gmail.com y en el teléfono 647 851 467. Parten de la premisa y así lo explican “un animal no es un juguete, ni una moda pasajera, es una responsabilidad, y si estás dispuesto a cumplir con todas sus necesidades, te animamos a que adoptes. Si lo dudas, aunque sea lo más mínimo, no lo tengas”.