El delegado de Obras Públicas y Vivienda, Francisco García, ha presidido la mesa técnica del Territorio, Vivienda e Infraestructuras Viarias en las que han estado presentes alcaldes y técnicos de los municipios de Santaella, Palma del Río, Villa del Río, Castro del Río, Aguilar de la Frontera, El Carpio, La Granjuela, Villafranca, y Córdoba capital. Esta reunión responde al compromiso acordado entre la Junta de Andalucía y los ayuntamientos afectados tras el pasado temporal de agua en la provincia, donde se estableció la constitución de tres mesas para prevenir en la medida de lo posible y minimizar las consecuencias ante un episodio fuerte de lluvias.
En la reunión de esta segunda mesa, que sigue a la celebrada ayer sobre gestión y formación ante emergencias, se han abordado diferentes asuntos. Francisco García ha explicado que se han repasado los daños que ha sufrido la red de carreteras (provinciales, autonómicas y estatales). En esta línea, el delegado ha explicado que la Junta además de proceder a la reparación de las vías afectadas que son de su titularidad, va a analizar los elementos que han agravado los daños por las lluvias, para establecer un plan que corrija los mismos en un futuro y minimizar los desperfectos que puedan producirse.
En estos momentos, la Junta está actuando en la A-386 en Santaella. Próximamente, se va a se va a trabajar en la A-421, el acceso a Villafranca y también en la carretera entre la Granjuela y Los Blázquez, la travesía de Aguilar de la Frontera, la carretera de Palma del Río a La Campana y la de Aguilar a Puente Genil.
Desde el punto de vista urbanístico, el delegado de Obras Públicas y Vivienda, ha explicado que en este encuentro se ha constatado que los terrenos que han sufrido mayores daños como consecuencia del agua, han sido aquellos clasificados en los planeamientos urbanísticos municipales como no urbanizables, mientras que en los urbanos y urbanizables, han sido mínimos.
Respecto a los daños en viviendas, igualmente se ha confirmado que aquellas más afectadas están construidas en suelo no urbanizable y que los planes generales de ordenación urbana de los municipios, recogen como no reconducibles. La Junta y los municipios afectados han convenido en eliminar algunas de las viviendas más afectadas, de manera progresiva, mediante un acuerdo con sus propietarios. Francisco García ha explicado que los ayuntamientos tendrán que llegar a acuerdos con estas familias y que la Junta colaborará en todo aquello que los municipios le demanden.