15 de octubre de 2019 | Mª del Mar Tello Pérez, Área de Comunicación
El Hospital Valle del Guadiato ayuda a los pacientes a gestionar su dolor
El centro hospitalario cordobés, que está acreditado por su trabajo continuado contra el dolor perioperatorio y en Urgencias, ofrece consejos de autocuidado
El Hospital de Alta Resolución Valle del Guadiato, ubicado en Peñarroya-Pueblonuevo, ha organizado una mesa informativa con motivo del Día Mundial del Dolor para concienciar a los pacientes de la importancia de su colaboración activa en el control del dolor.
Según apunta la supervisora de Bloque Quirúrgico del hospital peñarriblense, María Elisa Márquez, “nadie mejor que nosotros mismos, que somos los que sentimos el dolor, para actuar en beneficio de nuestra salud. Desde el hospital queremos hacer partícipes a los pacientes en el proceso de tratar y cuidar su dolor, formando equipo junto al personal sanitario, en el que su papel es fundamental”.
El Hospital de Alta Resolución Valle del Guadiato lleva trabajando desde hace tiempo en el tratamiento del dolor. Fruto de ello, es la acreditación que posee como ‘Centro contra el dolor perioperatorio’ y ‘Centro contra el dolor en Urgencias’, distintivos otorgados por el Observatorio para la Seguridad del Paciente -integrado en la Agencia de Calidad Sanitaria de Andalucía -.
Igualmente, el centro hospitalario peñarriblense obtuvo en 2017 el primer premio en I Congreso Nacional de ‘Mejores iniciativas en Dolor Agudo Postoperatorio’, organizado por Grünental, con su trabajo ‘Analgesia endovenosa domiciliaria para el control del dolor postoperatorio mediante sistemas de impulso por presión atmosférica’. Ésta trata del uso de bombas elastoméricas de analgesia intravenosa para el control del dolor postoperatorio en los pacientes que se han sometido a determinados tipos de cirugía ambulatoria.
Autocuidado del dolor
Algunos de los consejos ofrecidos por los profesionales del Hospital Valle del Guadiato son seguir las indicaciones del personal, respetar los horarios establecidos para tomar los analgésicos prescritos, realizar un diario (registro) del dolor, planificar las actividades diarias en torno al dolor, o aprender ejercicios de relajación, entre otros.