EQUO ha hecho este sábado un llamamiento a la ciudadanía a echarse a la calle el próximo 28F para reclamar dignidad y oportunidades para nuestra tierra. Para el partido verde, “ahora más que nunca tenemos que dejar claro y visibilizar en las calles que nuestra tierra no está dispuesta a seguir siendo menospreciada, y exige una financiación justa y equitativa, así como igualdad de oportunidades”.

Salustiano Luque, coportavoz de EQUO en Córdoba, considera que “tras 40 años de autonomía, Andalucía aún tiene pendiente reclamar lo que es suyo, mostrándose como una tierra de oportunidades especialmente para sus jóvenes, construyendo un nuevo futuro” en base a sectores emergentes como las energías renovables, la rehabilitación energética de edificios, la producción ecológica, o un nuevo modelo turístico más sostenible y respetuoso con el medio.

El partido verde invita a participar en las marchas que reivindicarán, especialmente, una defensa clara de lo público, tal y como ha explicado la también coportavoz andaluza y parlamentaria, Carmen Molina, que de hecho asistirá en Sevilla a la manifestación de la mano de la Plataforma en defensa del ferrocarril público y sostenible. “En estos tiempos de recortes, en inversiones y en nuestros derechos, tenemos que dejar claro que la Andalucía que queremos es la que defiende unos servicios públicos de calidad”, ha señalado Molina. “Educación, sanidad, transporte, dependencia,… No debemos dejar que nos sigan arrebatando el Estado del Bienestar que tanto nos costó construir, y por eso debemos echarnos a la calle este 28F”, ha insistido la diputada.

Colectivos y plataformas en defensa del tren, el Movimiento Andaluz por la Educación Pública, la Plataforma por la Renta Básica, la Marcha de la Dignidad o el Movimiento Andaluz en defensa del sistema público de pensiones, entre otros, han convocado la manifestación que tendrá lugar en Sevilla este miércoles bajo el lema 'La Andalucía que no se resigna y lucha: a la calle el 28-F', una movilización que EQUO apoya “porque formamos parte de esa ciudadanía que, efectivamente, no se resigna y trabaja día a día, tanto en la calle como desde las instituciones, por una tierra próspera en recursos, servicios y derechos”.