27 de mayo de 2017 | Adalberto García-Donas León
Futuro Campeón de motociclismo en Peñarroya-Pueblonuevo
José María Herrera Gómez con 3 años y 4 meses, tiene ya el gen de campeón en su ADN
Por su corta edad, aún es pronto para saber si tendrá continuidad o no en esto del motociclismo y aun así, José María Herrera Gómez, con solo 3 años y 4 meses, tiene ya la personalidad y el gen de campeón en su ADN.
Con su “media lengua” a la hora de hablar, acorde con su edad, tiene muy claro que su futuro está en el motociclismo, tan claro como saber calcular la trazada de una curva, donde debe frenar y donde acelerar, o simplemente, saber estar sobre sus motos, una Mini Moto Polini de 4’2 Competición y la KTM 50 de motocrós y que rendimiento sacarle a cada una de ellas.
En unos días comenzará a entrenar en el circuito de Villafranca (Córdoba) donde está adscrita la Escuela BOX 77 School. Allí los más jóvenes pueden aprender, con toda la seguridad que da un trazado permanente, los trucos y técnicas para rodar en un circuito.
Las bases federativas dicen que hasta los 6 años no puede participar en competición, que en el que nos ocupa y de seguir así las cosas, será en el Equipo Deza de dicha localidad, mientras tanto y hasta que llegue ese momento para poder competir, seguirá entrenando en dicha escuela días alternos entre semana y en un circuito improvisado con ruedas de coche en la conocida por los jóvenes Peñarriblenses como “Pista Roja”, una antigua pista polideportiva, que entre otras cosas, le vendría muy bien que el Área de Deportes del Excmo. Ayuntamiento, realizara el arreglo de su vallado, algo de iluminación y sobre todo, algo de limpieza de hiervas, incluso si una vez arreglado se integrara como una instalación más en la pista de atletismo, como pista permanente para mini motos, mejor que mejor, chavales como el pequeño José María y algunos más que los hay en nuestra localidad y comarca, que se animarían a practicar este bello deporte, se lo agradecerán.
De momento son los progenitores de José María los que se encargan de organizarle el circuito, barriendo la pista de algunos cristales y piedras, colocando las ruedas y cambiando la orientación del mismo cada cierto tiempo para que se vaya acostumbrando a diferentes trazadas, pero no vendría mal una ayudita de vez en cuando por parte del Ayuntamiento, sobre todo como digo, para la limpieza y el mantenimiento.
Sea como fuere, José María y sobre todo sus padres, tienen claro que primero está su formación escolar y después los entrenamientos, deseándole desde aquí, visto el talento y la técnica innata que tiene para la conducción de motos, una larga trayectoria en este difícil y costoso mundo.