8 de marzo de 2021 | Daniel Solano Sújar
Desde ese espacio de su banquillo, dignificó ese título de entrenador
Un diálogo permanente con sus jugadores
A cuantos hemos tenido esa gran oportunidad de vivir junto con ellos, esos tiempos nunca olvidados futbolísticos, esos hombres que tras un largo tiempo como jugadores, siguen ilusionados con este bello deporte del fútbol, y después de un tiempo de reciclaje de estudios, consiguen ese título de entrenador y lo seguimos teniendo en esta parcela que el fútbol te ofrece y así, sigue activo dejando su sapiencia por todos esos campos y pueblos de nuestra provincia, personas nunca olvidadas, ya que son un claro ejemplo de honradez, compromiso, lealtad y humildad, valores que ellos trasmiten a su plantilla para que así de esta forma, llegar a cuajar ese esquema deportivo y esa táctica a emplear en esa larga temporada, dejando claro que sin esfuerzo y respeto por esta actividad, nada se conseguirá.
Hace unos días nos ha dejado un exjugador y entrenador inolvidable de esta nuestra provincia, ese hombre entregado desde muy niño al fútbol, FERNANDO BURGOS, una persona sencilla, integra y muy querido en todo el entorno del fútbol cordobés, una persona con unos altos valores de educación mucho respeto por esta opción deportiva, llevo muchos equipos y en todos ellos dejó plasmado ese sentimiento de lo que significa la palabra fútbol, tuvimos la oportunidad de tenerlo de entrenador en nuestra comarca minera, en el C.F. PEÑARROYA, dejando un sabor muy especial, dirigiendo de una forma exquisita a toda su plantilla, trabajando y trabajando para realce de ese fútbol de nuestra Comarca del Guadiato y me consta que lo consiguió, Fernando era ese entrenador dialogante, muy respetuoso con todo el mundo, una persona cercana que sabía sacarle a los jugadores los mejor de ellos en el terreno de juego, lo hizo en Casablanca y lo hizo con el Villanueva de Córdoba, ese equipo del Valle de los Pedroches, Fernando Burgos en todo ese tiempo que le dedicó a este deporte, dejo claro su buen gusto por el fútbol, eso se le veía en sus planteamientos y creó escuela en esas facciones importantes para el desarrollo de esas tácticas y ese engranaje para que su máquina fuera al cien por cien en cuanto a entrega y pundonor, esa defensa de ese escudo era su primordial tarea de comunicar con su grupo y esa familia deportiva que creaba, era gracias a sus múltiples conocimientos de lo que significa la palabra fútbol.
Desde estas líneas mi mas sentido pésame ante el óbito de una persona que se dejo siempre la vida por el fútbol cordobés y de nuestra comarca, ese tiempo de entrenador en el C.F. Peñarroya, lo agradeceremos de por vida, haciendo extenso estas condolencias a toda su familia y amigos d.e.p. Fernando Burgos.