Los 400 kilómetros nocturnos del helicóptero robado que apareció en Belmez

Lugar donde fue encontrado el helicoptero

Algo más de 400 kilómetros tuvo que cubrir el responsable -o responsables, aún está por dilucidar- del robo del helicóptero antiincendios que apareció abandonado en la mañana del viernes en el término municipal de Belmez, al noroeste de la provincia de Córdoba.

La aeronave, que fue encontrada por la Guardia Civil en perfectas condiciones, había sido sustraída apenas unas horas antes, en la madrugada del jueves al viernes, en la base de la Brigada de Refuerzo de Incendios Forestales (BRIF) en el Prado de Esquiladores, entre las localidades de Buenache de la Sierra y Beamud, dentro del Parque Natural de la Serranía de Cuenca.

Un robo que requiere de pericia para manejar durante los 410 kilómetros que separan el Valle del Guadiato de la sierra conquense este helicóptero Bell 412, de un peso superior a las tres toneladas y capaz de superar los 250 kilómetros por hora, cuya licencia de vuelo requiere al menos 45 horas de instrucción, siempre que se sigan los procedimientos legales.

Según recogía este viernes la agencia EFE, varios trabajadores de la brigada antiincendios explicaron en redes sociales que los hechos tuvieron lugar de madrugada, cuando un número indeterminado de personas accedió a las instalaciones de la base, quitaron el «bambi» -contenedor de agua de la aeronave que se aprecia en la imagen superior-, repostaron combustible y huyeron a bordo del vehículo.

Fue entonces cuando Babcock International Spain, la empresa propietaria del vehículo aéreo, advirtió a las autoriades competentes -en este caso, el Ministerio de Transición Ecológica- que pusieron sobre aviso a la Guardia Civil e inició un operativo de búsqueda para localizar el helicóptero. Al mismo tiempo, la empresa puso en marcha un plan de contingencia para dotar a Prado de los Esquiladores con otra aeronave y así no mermar la labor de extinción de incendios en la zona.

Solo unas horas después, un grupo de efectivos de la Benémerita dio cuenta de este insólito hallazgo en las promixidades de la localidad cordobesa de algo menos de 3.000 habitantes, que en estos momentos se continúa investigando.

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