La Guardia Civil tuvo conocimiento el pasado día 5 de mayo, a través de una denuncia presentada en el Puesto de Peñarroya que se había cometido un hurto de una “manta” de joyas, valorada en unos 70.000 euros, en un establecimiento de joyería de la localidad.
Inmediatamente, la Guardia Civil se trasladó al lugar indicado y tras entrevistarse con el propietario y empleados del establecimiento, pudo saber que el hurto pudiera haber sido cometido, por una mujer de acento italiano quien tras distraer y ganarse la confianza de las empleadas solicitó le mostrasen diversas “mantas” de joyas, sustrayendo una de ellas. Asimismo, la Guardia Civil pudo saber que el propietario y empleadas del establecimiento, no se apercibieron de la falta de la “manta”, hasta dos días después de cometerse el hurto, tras solicitar un cliente este tipo de joyas.
Dada la gravedad de los hechos denunciados, la Jefatura de la Comandancia de la Guardia Civil de Córdoba, encargó la investigación al Equipo de Policía Judicial de Peñarroya.
Las primeras investigaciones unidas a los datos aportados por el denunciante y varios testigos, permitieron a la Guardia Civil saber que la supuesta autora, se había dado a la fuga en un turismo, ocupado por otra persona que la esperaba en las inmediaciones del lugar del robo.
Ante ello, la Guardia Civil centro sus investigaciones sobre el turismo, pudiendo averiguar que había sido alquilado a una empresa de alquiler en la localidad de Gavá (Barcelona), por una mujer cuyas características coincidían con las de la sospechosa. Por ello, la Unidad Orgánica de Policía Judicial de Córdoba, informó del desarrollo de la investigación a la Unidad Orgánica de Policía Judicial de Barcelona, quienes con el apoyo del Equipo de Policía Judicial de Peñarroya, continuaron las gestiones para la identificación, localización y detención de la supuesta autora y su cómplice.
Con el avance de las gestiones la Guardia Civil pudo identificar a la supuesta autora y a su cómplice, que resultaron ser R.M.R., de 66 años y V.G., de 67 años, ambas de nacionalidad italiana.
Tras identificarlas plenamente, la Guardia Civil centró sus investigaciones sobre ellas, logrando averiguar tras una laboriosa e intensa investigación, que R.M.R., había sido identificada en joyerías de las provincias de Córdoba, Almería, Zamora, Castellón, Huesca, Barcelona y Ciudad Real, asimismo la Guardia Civil pudo saber que recaía sobre ella una orden de búsqueda por la comisión de un hurto en la provincia de león y un robo con violencia e intimidación en La Coruña.
Asimismo, fruto de la investigación que la Guardia Civil venía efectuando, pudo saber que R.M.R., junto a su cómplice V.G., pensaban trasladarse a Madrid para cometer un hurto, no logrando su propósito regresando a su domicilio en Gava.
Ante ello y tras tener conocimiento de que entre los días 14 y 17 de junio, las sospechosas tenían previsto cometer otro hecho delictivo, la Guardia Civil decidió establecer un dispositivo de servicio orientado a la localización y detención de las sospechosas, dentro del cual se puso en conocimiento de la Policía Autonómica de Cataluña el desarrollo de la investigación, quienes en fechas recientes procedieron a la detención de R.M.R., a la que se le imputa la autoría de numerosos hurtos cometidos en joyerías de la geografía española, fruto de la investigación que la Guardia Civil venía realizando.