Cuando parecía que ya había terminado la campaña electoral y se habían celebrado las elecciones, había llegado el momento de ponerse a trabajar para que el futuro equipo de gobierno hiciera realidad las múltiples promesas electorales realizadas.
Pero parece ser que no, que, en lugar de dedicarse a ello, el entorno del ganador de las elecciones municipales continúa con su campaña de mentiras. Hoy nos despertamos con un artículo publicado por el señor Carlos Serrano, el cual vuelve a utilizar su pluma con la maldad que le caracteriza, y demostrando, una vez más, lo bien que se le da la mentira.
Al parecer, al señor Carlos Serrano, y a todos los que comparten su artículo, les molesta que el ayuntamiento haya sacado a concurso la plaza de tesorería, pero se les olvida contar porqué se saca. Dicha plaza se saca, no por capricho del alcalde, sino a requerimiento de la Dirección General de Administración Local de la Junta de Andalucía, la cual nos obliga a poner a su disposición dicha plaza para ser cubierta por un funcionario con habilitación de carácter nacional y con una titulación específica, y no como estaba cubierta. Esto también es transparencia.
El señor Serrano intenta transmitir que dicha convocatoria se saca a prisa y corriendo, y vuelve a mentir. El procedimiento para cubrir esta plaza de la forma exigida por la Junta de Andalucía se inicia a primeros del mes de marzo del año 2022, tras la reunión de la mesa de negociación de los funcionarios, la cual acuerda por unanimidad su clasificación como grupo A1, tal y como marca la ley. Dicho acuerdo es ratificado por el pleno del mes de abril del año 2022 del Ayuntamiento de Peñarroya-Pueblonuevo, o sea, hace más de un año. Y no vimos ninguna queja en su momento por parte de nadie, puesto que se aprobó por unanimidad. Esto también es transparencia.
En dicho artículo se critica que alguna persona se presente a un proceso selectivo. Quizás debería leerse el artículo 14 de la Constitución Española, en el que se hace referencia al derecho de igualdad y no discriminación por motivo alguno. Por tanto, cualquier ciudadano tiene derecho a poder participar en un proceso selectivo, y no puede ser discriminado por haber sido concejal. ¿Qué oscurantismo puede haber en una convocatoria que se publica en el BOP para darle toda la publicidad posible, y a la que se puede presentar todo aquel que quiera, y que cumpla los requisitos? Esto también es transparencia.
Resulta curioso que el señor Carlos Serrano critique algo que viene marcado por la Junta de Andalucía, y, sin embargo, se enfada con el actual equipo de gobierno porque, en su día, no se le hizo caso en la propuesta que hizo de echar a la calle a la trabajadora social para "colocar" a su hija, la cual vivía en Méjico. Ya que nos ponemos a ser trasparentes, seámoslo para todo.
Qué triste que, en lugar de encarar la nueva etapa con ilusión, se dedique el tiempo a seguir difundiendo mentiras con tal de desprestigiar a los demás. Así no se avanza.