22 de noviembre de 2022 | Un militante socialista
La justicia ha hablado
Revés jurídico para nuestro ayuntamiento
“Un derecho no es algo que alguien te da, es algo que nadie te puede quitar”, y los ciudadanos de Peñarroya- Pueblonuevo tenemos derecho, por la ley de transparencia, a conocer todo cuanto ocurre en nuestro Ayuntamiento, y cómo se administra nuestro dinero.
Días pasados, bajo el título de “cuando la política se desvirtúa, la justicia actúa”, publicado en Infoguadiato, se daba cuenta de la demanda interpuesta por el concejal Víctor Pedregosa contra el alcalde, en reclamación del dinero no abonado desde al año 2.019 y que, aprobado en pleno, se abona a todos los concejales por la asistencia a los plenos del ayuntamiento, 250 euros mensuales.
Días pasados se celebró el juicio en Córdoba, en el Juzgado nº 2 de lo Contencioso Administrativo, y AHORA YA CONOCEMOS LA SENTENCIA. Una vez más, el Poder Judicial pone los puntos sobre las íes cuando algún político saca los pies del contexto de los límites de sus atribuciones y de la justicia; gracias a ellos y a los cuerpos de seguridad del Estado, lo mejor que funciona en nuestro país, los ciudadanos nos podemos sentir seguros y satisfechos, a pesar del esfuerzo del poder político por controlarlos.
¿En qué términos se expresa la sentencia? Al final de dicha sentencia, en el “FALLO”, se dice textualmente: “Se estima el recurso…interpuesto por D. Víctor Manuel Pedregosa Viso contra el Ayuntamiento de Peñarroya-Pueblonuevo…se declara el derecho…del demandante al abono de la indemnización fijada a los concejales por su asistencia a los Plenos, y a que se le abone las cantidades dejadas de percibir por tal concepto…con imposición de las costas a la demandada…” En el fundamento jurídico segundo de la sentencia se especifica la cantidad por costas impuesta a nuestro Ayuntamiento: “…han de imponerse al Ayuntamiento demandado las costas, si bien se limitan a la cantidad de 800 euros…”.
Ahora ya sabemos la cantidad económica que nuestro ayuntamiento ha de abonar a Víctor Pedregosa (desde el verano del 2.019 hasta la fecha, a razón de 250 euros mensuales); sabemos también que ha sido condenado en costas, 800 euros que también ha de salir de las arcas municipales, como igualmente los honorarios de la abogada contratada.
Ante estos hechos, muchos ciudadanos nos podemos hacer algunas reflexiones y preguntas.
-¿A QUÉ SE HA DEDICADO EL DINERO NO ABONADO AL SR. PEDREGOSA? Se trata de una cantidad respetable, y los ciudadanos tenemos derecho a saber a qué se ha dedicado dicho dinero por una decisión arbitraria (¿?) del alcalde.
-¿TENÍA NUESTRO ALCALDE CONOCIMIENTO EXACTO DE LO QUE HACÍA?, porque el alcalde no tiene poder para oponerse o suspender lo que había sido aprobado en un pleno. Por otro lado, el ayuntamiento dispone de técnicos a los que nuestro alcalde debería haber consultado, como, así mismo, ellos deberían haberle aconsejado, comunicándole que no podía tomar una decisión como la tomada, aunque no se lo pidiesen.
-¿QUIÉN PAGARÁ LOS HONORARIOS DE LA ABOGADA Y LOS 800 EUROS DE LAS COSTAS?, Pienso, sin lugar a dudas, que, por dignidad y responsabilidad, ese dinero, debe salir del bolsillo del culpable, en este caso de nuestro alcalde, y no usar dinero público, para pagar “su equivocación”.
Y ahora, ante los hechos acaecidos, ha llegado el momento de una TRANSPARENCIA TOTAL por parte de nuestro alcalde, el cual, tras casi ocho años al frente del gobierno municipal, se ve que aún no ha tenido tiempo de cumplir con su obligación de mantener a los ciudadanos informados, en la página web oficial del ayuntamiento, de toda la gestión realizada.
“La falta de claridad es siempre un signo de deshonestidad” y falta de respeto a los ciudadanos, a los que todo político debe rendir cuentas. Séanos claro, sr. alcalde, denos una explicación de todo cuanto ha ocurrido con los hechos acaecidos, y díganos si está dispuesto a pagar de su bolsillo los gastos ocasionados, pago de abogada y costas, de los cuales Vd. es el único responsable.
No olvide nunca que “la falta de transparencia produce desconfianza y un profundo sentido de inseguridad”.