7 de enero de 2020 | Juanma, un vecino del Llano Quintín
Los caramelos no son para todos
Los Reyes Magos dejan sin “ilusión” al Llano Quintín

La celebración más mágica de la Navidad, especialmente para los más pequeños, es la visita de sus Majestades de Oriente la noche de Reyes, que en Peñarroya-Pueblonuevo se festeja desde por la tarde con una Cabalgata que recorre los diferentes barrios del municipio con un cortejo de 12 carrozas con más de 200 personas.
Este año, la organización de la Cabalgata informa que, en un recorrido de 7 km, se han repartido “unos 2.000 kilos de gominolas, bolsas de snacks, 1.500 balones y más de 1.500 juguetes”. Un despliegue que, a pesar de su abundancia, ha dejado mal sabor de boca a los numerosos vecinos del Llano Quintín quienes, tras la fría espera, comprobaron que los Reyes Magos, aún con los sacos cargados de caramelos y juguetes, únicamente paraban en sus calles para repostar y preparar la copiosa descarga de “ilusión” en El Llano.
Esta situación que viene repitiéndose durante los últimos años, a pesar del buen hacer y altruismo de los organizadores de la Cabalgata, deja a los niños de estos barrios faltos de ilusión, una importante sensación de desigualdad de trato entre los presentes, y el suelo de la calle peatonal Juan Carlos I y la Plaza Santa Bárbara cubierto de caramelos desperdiciados.
Majestades Melchor, Gaspar y Baltasar: el próximo año, confiamos que esta situación cambie y la “ilusión” llegue por igual a todos los niños del pueblo.