A las doce de la noche, con puntualidad rigurosa salía de la parroquia de Santa Bárbara, a completar su estación de penitencia Nuestro Padre Jesús Cautivo. Este paso es portado por costaleros en implacable silencio, sólo acompañado por un redoble de tambor de la Agrupación musical de Nuestra Señora de la Amargura. El paso que se recogió sobre las dos de la mañana recorrió la Plaza Santa Bárbara, Juan Carlos I, Álvaro Muñoz, Virgen del Carmen, Puente, Olózaga, República Argentina, Navarro Sáez y la Luna, para llegar de nuevo a la Plaza de Santa Bárbara y hacer su entrada en el templo. Los nazarenos que acompañan al paso visten túnica y cubrerrostro caído morado, cíngulo de esparto, zapatilla negra y escapulario. Este es una de los pasos que cuenta con más devoción en la localidad, ya que son numerosas las personas que lo acompañan durante todo su recorrido.