13 de diciembre de 2014 | Infoguadiato
El coro rociero de la reina Fabiola: "Hemos sido su última sorpresa"
SUS MIEMBROS SON EMIGRANTES DE LA CUENCA MINERA DE PEÑARROYA-PUEBLONUEVO
El Coro Rociero Vilvoorde lleva veinte años cantando. Sus miembros son emigrantes andaluces de la provincia de Córdoba, españoles que salieron de Peñarroya-Pueblonuevo cuando cerraron la cuenca minera. 'No somos profesionales, somos amateurs. Cantamos también sevillanas y rumbas, pero en la comunidad belga somos conocidos por las misas. Es algo poco común por aquí que llama mucho la atención', explica un portavoz del coro pocas horas después de haber cantado en el funeral por la reina de los belgas.
Fue precisamente en una de esas misas donde tuvieron contacto por primera vez con la reina Fabiola. 'Teníamos una buena relación con ella. Siempre celebramos aquí una misa en Nochebuena. Hará unos siete años, no sabemos cómo se enteró, pero se presentó por sorpresa. Luego volvió a venir un par de veces a esa misa tan especial'. Entre Fabiola de Bélgica y el coro se estableció una relación muy entrañable que llevó a la reina a invitarles a cantar en varias ocasiones. 'Estuvimos en una misa que le dio al rey Balduino y varias veces en las misas privadas que organizaba en el Palacio de Stuyvenberg, en las que daba luego una pequeña recepción'.
Por eso, aunque sabían que la reina les tenía un especial cariño, la llamada de palacio el pasado sábado les pilló 'totalmente por sorpresa'. 'Al parecer, ella había dejado escrito cómo quería que fuera su despedida y había especificado que quería que nosotros cantáramos en su último adiós. Nos pusimos muy nerviosos, entre otras cosas porque nuestro guitarrista estaba pasando unos días en España y ha habido que buscar a otra persona, pero al final hemos estado ahí tal y como ella quería'.
De hecho la música, tal y como la reina Fabiola había pedido, ha sido una parte fundamental de su funeral. De Bach a Jacques Brel. Se conocía la participación de otros cantantes, pero del coro rociero nada se sabía. Hacia el final de la ceremonia, la formación cantó una 'Salve Rociera' que logró emocionar y llevar a las lágrimas a la familia real belga, entre otras cosas porque no se lo esperaban. 'Hemos sido su última sorpresa'.
Cote Villar, el mundo.