¿Qué sintió al ser elegido pregonero de la Semana Santa de Peñarroya Pueblonuevo?
En un primer momento tuve una sensación de alegría y de recibir un enorme honor. Posteriormente, con el paso de los días a la vez que iba escribiendo, el sentimiento era de alta responsabilidad. Ahora estoy deseando que llegue el día con la intención de agradar y poder estar a la altura del honor recibido

La verdad es que no se puede decir que yo tenga una dilatada vida cofrade. Al contrario, mi relación con la Semana Santa apareció cuando llegué a esta ciudad. Desde entonces tuve la suerte de que los cofrades de Peñarroya-Pueblonuevo me enseñaran como viven ellos la Semana Santa y me acogieran entre ellos. Durante 11 años he podido conocer nuestras hermandades en primera persona realizando los programas cofrades en la radio, posteriormente participando en las tertulias cofrades en Radio Peñarroya, en los últimos cinco años he tenido una muy cercana relación con la hermandad del Cristo del Amor y la Virgen de la Amargura interviniendo en casi todos los actos que ellos han realizado.

Pues precisamente lo quiero abordar desde mi casi inexistente vida cofrade hasta que llegué aquí. Quiero que sea un homenaje a los hombres y mujeres que hacen posible la Semana Santa de nuestro pueblo y que compartieron conmigo sus vivencias cofrades. A la vez quiero que sea una arenga a que continúen haciendo posible que se cumpla con nuestras tradiciones año tras año y generación tras generación. Quiero que sea un pregón muy cercano a todos ellos.

Al poco tiempo de llegar conocí la Semana Santa de la mano de la Virgen de la Esperanza, a la que me acercó un compañero y de la que siempre he llevado una foto en el coche. Después recuerdo la imagen del Cristo del Amor el primer año que salió en procesión por las calles de El Cerro en la primera ocasión que tuve de vivir nuestra Semana Santa. Tampoco podré olvidar nunca una imagen de los tres pasos de la hermandad de Peñarroya por sus calles. Después he vivido muchos momentos, pero estos dos últimos siempre los recuerdo cuando llega la Semana Santa.

Diferente en cada una de sus hermandades. Única por su dualidad y por sus características en las formas de cargar los pasos. Y sobre todo, solemne y elegante.

Creo que no podría contestar a esa pregunta. Podría decir muchos momentos que no me quiero perder en cada Semana Santa. Por ejemplo: La Virgen de los Dolores de Peñarroya cruzando el puente ya de recogida el Viernes de Dolores, la salida de El Cautivo, la subida de la Borriquita por la calle Olózaga, la Virgen de la Esperanza por la calle Navarro Sáez, la solemnidad del Santo Sepulcro y naturalmente, la recogida del Cristo del Amor y la Virgen de la Amargura.

A ello contribuyen varias cosas. En primer lugar la dualidad de imágenes en Peñarroya y Pueblonuevo. Naturalmente debo destacar el papel que dentro de las hermandades tiene desde hace muchos años la mujer, siendo un pilar básico en nuestras hermandades. Y finalmente, la forma de llevar los pasos que es diferente en cada hermandad y casi en cada paso: a costal, a hombro, por hombres y mujeres e incluso por cuadrillas mixtas. Todo hace que cualquiera que conozca la Semana Santa de Peñarroya-Pueblonuevo se quede impresionado por la variedad, pero creo que lo que de verdad la hace distinta es la implicación de los cofrades y cómo en pocos años ha tenido un crecimiento espectacular.

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