El pasado miércoles 11 de diciembre se presentó el libro “Vilvoorde en la Primera Guerra Mundial 1914-1918” de Adelino Calderón Molero en el Ayuntamiento de Vilvoorde. Los padres del autor, originales de Peñarroya-Pueblonuevo, fueron emigrantes de la primera ola migratoria de los años 1929-1930.
Desde el año 2002 Adelino se dedica a escribir libros de base. En los próximos meses Adelino Calderón publicará el tercer tomo de una trilogía sobre la historia de las cervecerías belgas.
En una visita del hermanamiento entre Peñarroya y Vilvoorde, Adelino regaló los dos volúmenes de “Empresas y Puestos de Trabajo en el siglo XX en Vilvoorde” a la delegación que encabezaba Rafael Muñoz.
La primera visita de Adelino Calderón a Peñarroya Pueblonuevo se produjo en el año 1956 con toda la familia reunida en casa de su abuelo Damián Calderón, “lo pasamos todos fenomenal ya que para mi es el más bonito de España”. El pasado mes de octubre Adelino regresó al pueblo durante tres días para saludar a Rafael Muñoz y ver, a lo mejor por última vez, la casa de sus abuelos.
Por razones de trabajo, Adelino Calderón está nacionalizado belga pero su corazón sigue siendo español. Para él ser emigrante es una situación muy singular, ya que en Bélgica es considerado un español y en España se le conoce como “el belga”. Cuando el avión llega a Madrid dice revivir. El médico le ha dicho que esto es porque sus “genes” son españoles pero cree que a sus 74 años le sería muy difícil vivir en España.
Durante su última visita de dos semanas en España, Adelino se sorprendió de que sólo escuchara quejas por la situación actual en la que se encuentra el país, cuando los estadios de fútbol están llenos y se paga cientos de millones de euros a los futbolistas, algunos lesionados continuamente. Además, cree que España tiene magníficos trenes de alta velocidad y de las mejores carreteras de Europa.