Pasaban 10 minutos de la una de la mañana del pasado 24 de septiembre cuando los vecinos de Peñarroya Pueblonuevo sintieron como se movían sus viviendas.

El desconcierto surgió en la población que sitió este movimiento aunque la gran mayoría, desconcertada no sabía lo que había ocurrido, fue por la mañana cuando ya todos los vecinos descubrieron que había sido un terremoto. 

El seísmo tuvo una intensidad de 3,3 en la escala Richter, el más fuerte de los que ha sufrido el municipio en su historia.

 El  epicentro   estuvo  entre Belmez y Peñarroya, y dentro de la localidad peñarriblense  en los núcleos que más se ha notado ha sido en las barriadas de Los Cuarteles y el Cerro.

En la barriada de Los Cuarteles algunos vecinos han visto como aparecían pequeñas grietas en sus fachadas, como es el caso de la Vivienda de carmen que señalaba que “al salir esta mañana de casa he visto como en mi fachada habían aparecido una serie de grietas tanto verticales como horizontales que   creo que se han producido por el terremoto”, y añadió que “si noté como pasadas la una de la mañana la casa se movía”.

José Otro vecino   la calle barranco de esta barriada afirmaba que “anoche no sentí nada, también me pilló en el primer sueño y me he enterado esta mañana”. En cuanto a daños personales dijo que “a mi vivienda no le ha pasado nada pero hay algunos vecinos que dicen que si han aparecido grietas en las fachadas de sus viviendas”.

En la barriada del Cerro Antonio señalaba que si notó el seismo, “estaba viendo la tele y noté como se movía, todo en principio pensé en un coche que había pasado muy rápido, pero al salir a la calle no había nadie”.

Pedro es otro vecino de esta barriada que notó el terremoto, me iba a ir a la cama cuando note el ruido, creí que eran unos gatos por el tejado, pero era un sonido muy fuerte para ello, así que cuando vía que salían más vecinos me di cuenta que había sido un terremoto”.

La alcaldesa peñarriblense, la socialista Luisa Ruiz señaló que “no ha habido daños materiales pero si el desconcierto lógico que nos hizo salir al exterior de nuestras casas para ver si había ocurrido algo”.

Este es el tercer terremoto que sufre la localidad en los últimos 30 años, ya que en 1986 hubo otro con una intensidad de tres grados, y   ya inicios de la década de los setenta hubo otro seísmo que afectó a la localidad.

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