Más de un centenar de profesionales del Hospital Universitario Reina Sofía que han decido dejar de fumar en el último año han acudido para lograr su objetivo a la consulta de deshabituación tabáquica ubicada en las dependencias de la Unidad Medicina del Trabajo, en la primera planta del Hospital General, que depende de la Dirección de Servicios Generales del centro.
El médico del trabajo que atiende esta consulta, Antonio Ranchal, destaca que la nueva prestación ha tenido muy buena acogida por parte de los trabajadores del centro desde que se puso en marcha hace un año. En este espacio, señala el doctor, “ayudamos al profesional a dejar de fumar; aunque debe ser él quien decida cuándo y desde esta consulta colaboramos para facilitarle la mejor manera para hacerlo”.
El programa de deshabituación tabáquica que se lleva a cabo en este espacio persigue aumentar la motivación de profesionales fumadores que desean dejar el tabaco, incrementar la autosuficiencia y mantener la abstinencia. Para intentar conseguirlo se tienen en cuenta aspectos físicos, psicológicos y sociales de la adicción mediante tratamiento médico (terapia sustitutiva de la nicotina, bupropión y vareniclina) y psicoconductual, fundamentalmente.
El estudio que se realiza al profesional incluye una exploración clínica básica, la recogida de datos antropométricos (talla y peso), una entrevista personal que persigue que “la propia persona se comprometa y decida cuándo dejar de fumar”, explica el médico, y cuestionarios específicos para conocer la dependencia del tabaco.
Además, se lleva a cabo una cooximetría y una espirometría, pruebas que miden los niveles de monóxido de carbono y la capacidad pulmonar, respectivamente, y estudio radiológico según criterio médico. La planificación en la asistencia para cada persona plantea unas seis sesiones, siendo el objetivo fundamental, una vez que deja de fumar, evitar la recaída, de ahí la importancia del seguimiento durante un periodo prolongado.
Primeras conclusiones
Un análisis del primer año de funcionamiento de la consulta concluye que alrededor de la mitad de las personas que han participado había dejado de fumar cuando fue consultada. Se realizó una encuesta telefónica al total de 105 profesionales (67 mujeres y 38 hombres) que han pasado por ella, de los que respondieron 69, es decir, el 66%. De ellos, 38 personas, el 55%, seguían con abstinencia. Entre estos trabajadores se incluye personal sanitario y no sanitario. Los grupos más numerosos son los de auxiliares de enfermería, enfermería, facultativos y auxiliares administrativos.
Por otra parte, desde el área médica y de enfermería del hospital se desarrollan otras propuestas encaminadas a dejar de fumar como el segundo grupo para la intervención avanzada grupal, que se pondrá en marcha el próximo mes de octubre. Además, en 2009, un total de 1.629 profesionales del centro se formaron en intervencion básica en tabaquismo, tanto presencial como on line -actuación desarrollada por la implicación de la supervisora del servicio de neumología, Matilde Membrillo-. Estas iniciativas se organizan con la participación de profesionales de Medicina del Trabajo, del servicio de Neumología, la Unidad Integrada de Formación y la Unidad de Rehabilitación cardiaca, entre otras unidades.
Finalmente, todas las actuaciones que se llevan a cabo en esta parcela forman parte de un conjunto de medidas adoptadas por el Gobierno andaluz en el Plan Integral de Tabaquismo de Andalucía, que también integra planes intersectoriales con estrategias de prevención de consumismo, de información y de atención a los fumadores.

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