La eléctrica Viesgo confirmó ayer a ABC que trabaja ya en el proceso de cierre de la central térmica (produce energía eléctrica a partir del carbón) de Puente Nuevo de Espiel, con la vista puesta en que deje de funcionar en junio de 2020. La normativa de emisiones aprobada por la Comisión Europea obliga a que la planta, si no recibe potentes inversiones, no pueda seguir operativa más allá de la citada fecha. La UE desarrolla una política medioambiental que reduce la existencia de centros de producción de energía a partir al carbón, un material más contaminante que otros que se vienen usando para generar electricidad.
Fuentes oficiales de Viesgo, firma nacional más que centenaria que se dedica a la producción y distribución de electricidad, indicaron los motivos que llevan a esta empresa a tomar esta decisión. Recordaron que los niveles de emisiones fijados, para reducir la contaminación, llevaron a esta compañía a invertir en su central térmica de carbón de Los Barrios en una desnitrificadora para menguar sus emisiones. «Son obras muy complicadas, llevan como un año y tienen un coste de 60 a 80 millones», añadieron.
Viesgo descartó hace una inversión «de esas magnitudes» en una planta como la de Córdoba, que con la configuración que conocemos data de 1981 —eso sí, este tipo de actividad hunde sus raíces en el municipio espeleño desde 1966—. A las medidas para reducir las emisiones, añadieron, había que sumar el hecho de que «había que acondicionar la central casi, casi, como si fuera nueva». Todas estas cuestiones jugaron en contra de realizar esa inversión en Puente Nuevo. Y hubo un último factor: un escenario en el que «no hay ayudas al carbón y el marco regulatorio del carbón».
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Lo que busca la compañía al haber empezado el papeleo —cumplimentar todos los trámites puede prolongarse en el tiempo— es llegar «al día D» del cese de la actividad con «todas las autorizaciones» y es después de dicho cese —o sea, en principio, a partir de junio de 2020— cuando empezará el desmontaje. «Normalmente, no desmantelamos todo cuando se para una fábrica. Hay que tener en cuenta que es una planta muy grande, una instalación industrial, que tiene edificios y no la vacías entera», señalaron estos interlocutores. Se tienen en cuenta cuestiones como elementos que se puedan reutilizar o vender.
Instalaciones y plantilla
No extraña tampoco que se mantengan parte de las instalaciones porque desde Viesgo se señala que «estamos en contacto permanente con el Gobierno de España, el Ministerio para la Transición Ecológica y la Junta para facilitar que el futuro del emplazamiento de la central sea el más apto para la transición energética, analizando posibles opciones de desarrollo futuro de forma coordinada». ¿Y qué significa esto último exactamente». Los interlocutores consultados en esta compañía avanzaron que «nuestra intención es buscar alternativas» para la factoría de Puente Nuevo. «Sería una irresponsabilidad no buscarlas», añadieron.
En cuanto a la plantilla, formada por unos setenta trabajadores, los interlocutores consultados en Viesgo indicaron que ésta conoce el cierre. Indicaron que hay un grupo muy grande de ellos que «se va a jubilar». «Son más del cincuenta por ciento de la plantilla», añadieron. Con el resto de trabajadores y los sindicatos, se buscarán cuáles son «las mejores alternativas, ya sea en otras plantas de Viesgo, en otras líneas de negocio o buscando otras opciones».
«Eso todavía no lo tenemos detallado. Hemos empezado ahora a hablar con ellos y no tenemos ningún plan cerrado, porque aún hay tiempo», añadieron las fuentes consultadas en esta compañía.

Fuente: ABC

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