Los años van pasando y pasando y los recuerdos aún llegan nítidos, esa década de los años sesenta, esos años que tanto deporte generaba esta cuenca minera, la verdad los que hemos tenido esa gran oportunidad de vivir esos años, vimos en directo esos grandes acontecimientos deportivos, ya en el mes de Junio de 1960, el PEÑARROYA C.F. , jugaba en el SANTIAGO BERNABÉU, la final del campeonato de aficionados de España, ese equipo que dejó marcado para siempre su nombre en la Real Federación de Fútbol de España, los nombres de Parrilla, Noriega, Antoñin Fernández, Pepin de las Nieves y otros quedaron registrado para la eternidad en ese acta arbitral, de verdad, sólo con recordarlo me produce una gran alegría y un grato recuerdo del que me siento muy orgulloso, de que un equipo de mi comarca, llegara a esa gran final, aunque la perdiera como así fue.
Hoy quiero seguir comentando esos deportes que iban apareciendo en esa década y no podía dejar de pasar este momento para hacerle un pequeño homenaje de reconocimiento, a un grupo de personas que dignificaron de una forma espectacular el deporte del balonmano, ellos en esos tiempos fueron grandes percusores de lo que llegó a ser este equipo peñarriblense, en ellos se juntaron unos chavales ,estudiantes, que dejaron el pabellón en lo más alto, su nivel era grandísimo y esos partidos jugados en el Polideportivo del sector sur de nuestra capital, era todo un espectáculo ,este equipo de la cuenca minera, de ahí de ese pueblo blanco y estremecedor, PEÑARROYA PUEBLONUEVO, todos ellos fueron grandes jugadores de un alto nivel, en toda nuestra zona eran líderes en todo, y cuando competían en aquellos años, enfrentándose a ciudades y pueblos importantes como ese pueblo de Puente Genil, este equipo de balonmano siempre se lo ponía muy difícil, recuerdo que en esos campeonatos de la OJE, eran los mejores de toda nuestra comarca.

En esa alineación todos ellos aportaron su granito de arena, era un equipo muy compacto y además con jugadores muy unidos y amigos, recuerdo a todos, el brazo de Ernesto, era mortífero, Pando, Nieto, Valero, Quique, Pepe Pino y Pino, Quesada, Angelín como se movía, de verdad era un equipo que dignificaba ese gran deporte y fueron parte muy importante en la historia deportiva de ese gran pueblo, también me acuerdo de otros posteriormente y bueno de ese gran portero ORIVE, que momentos más agradables el poder haber estado ahí en esos momentos deportivos junto a ellos.

La historia deportiva la hacen más grande los pueblos y esas personas que a lo largo de ese tiempo, estuvieron ahí, desde ese momento de unión, supieron que esa amistad se iba acoplando más y más, y hoy después de muchísimos años al recordar todo estos ratos vividos nos hace sentirnos más felices y más orgullosos de nuestra vida en esta comarca minera que tanto añoramos y queremos.

Desde Madrid, con todo mi cariño y respeto para todos estos grandes deportistas y grandes personas, un fortísimo abrazo.

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