Desde el centro quisieron manifestar, frente al “Árbol de la Paz”, el convencimiento de que todos juntos podemos transformar la cultura de la guerra y la violencia en una cultura de Paz y no Violencia.
Comenzaron la jornada haciendo la oración del Papa Francisco que en este año expresa así su deseo de Paz para todos: “Deseo la paz a cada hombre, mujer, niño y niña, a la vez que rezo para que la imagen y semejanza de Dios en cada persona nos permita reconocernos unos a otros como dones sagrados dotados de una inmensa dignidad. Especialmente en las situaciones de conflicto, respetemos su «dignidad más profunda» y hagamos de la no violencia activa nuestro estilo de vida”.
Todos juntos desearon que el centro se convierta en instrumento de paz y entendimiento entre personas de distinta formación, raza, cultura y religión; que sea un centro que educa para la vida y que busca desarrollar en los alumnos las capacidades, las competencias y los valores necesarios para así ́ poder comprometernos todos en la construcción de un mundo mejor, un mundo más justo y más humano que permita que todos los individuos tengan la misma oportunidad de desarrollar plenamente sus facultades en el seno de una sociedad democrática, libre, justa, responsable y en paz.
Todo el acto estuvo acompañado con canciones que promueven los valores de Paz y rechazan la Violencia.

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