La localidad guadiateña de Villanueva del Rey acogió durante los días 5 y 6 de noviembre, la tercera edición de la fiesta de la trasiega. Son muchos los municipios que aprovechando labores ancestrales del campo están poniendo en marcha fiestas con las que pretenden recuperar estas tradiciones y darlas a conocer a los más jóvenes, eso sí, sin olvidar, el lado turístico.
Muchas han sido las personas, que se han acercado por Villanueva del Rey, para asistir a las explicaciones teóricas y prácticas de cómo se hace la trasiega en el vino, explicadas por un enólogo que incidió en la importancia del vino en la zona, los asistentes pudieron ver como se llevaba el vino de las parras, transportado en mulas, para llevarlo a desgranar y posteriormente a la prensa de donde se obtiene el vino, todo un proceso artesanal que en Villanueva del Rey no quieren que se pierda.
Es, sin duda, una labor esencial que realiza entre una a una y dos veces al año en las barricas. Es la trasiega artesanal, el traspaso del vino de una barrica a otra. Un delicado y mágico proceso que desarrollamos cada seis meses y que merece mucho la pena ser disfrutado.
Es el método que, a finales del siglo XIX enseñaron los franceses, se trata al vino con el máximo cuidado, con un breve contacto del vino con el aire en el momento en el que sale por la canilla y llega al embudo. Un breve contacto que otorga la vidilla suficiente al vino para aguantar otros seis meses de crianza.
Como no, una vez hecha las demostraciones, todos los asistentes pudieron degustar vino de pitarra y tapas típicas de la localidad, este año se han repartido entre los asistentes más de 500 litros de vino.
El alcalde, Pedro Barba, dio a conocer que una vez más son muchas las personas que se han acercado a la localidad a vivir in situ esta fiesta, “han venido muchas personas de distintos municipios de la comarca y es más, han venido vecinos de distintos puntos de la geografía española como es el caso de Palma de Mallorca, que hacía mucho tiempo que no visitaban su pueblo”, y añadió, “la elaboración del vino es algo bonito, muy interesante y ver una demostración como la que hemos visto es muy difícil de visionar casi en cualquier otro punto de la geografía española, por todo esto estamos muy orgullosos de haber puesto los cimientos de lo que ya es la tercera fiesta de la trasiega”.
Por su parte el delegado de Cooperación con los municipios de la Diputación de Córdoba, Maximiano Izquierdo, destacó que “desde el área de desarrollo y desde la Presidencia de Diputación, creemos conveniente, que todos aquellos aspectos de los pueblos de la provincia, se resalten y se apoyen, ya que no solo la recuperación y puesta en valor de los mismos sino que contribuyen a impulsar la economía a través de la artesanía y de lo que es el turismo, por eso la Diputación en actividades como esta no vamos a dejar de apoyarlas porque son un elemento que contribuye al desarrollo de nuestros pueblos”.
Además se habilitaron más de 20 stands donde se ofrecían productos típicos de la zona, tanto vinos, aceites, derivados del cerdo, dulces y artesanía de la zona, además ha habido un cortador de jamón, concurso de vino de pitarra y atracciones para los más pequeños.

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