La Casa de la Cultura acogió la final del certamen nacional de Cante de las Minas de Peñarroya-Pueblonuevo, que cumplía su XXXI edición. El ganador de este año, el lucentino Antonio José Nieto, recibió la lámpara minera de manos del alcalde de la localidad, José Ignacio Expósito, el tradicional trofeo que se concede a los vencedores.
La segunda posición fue para la malagueña Rosa Campos mientras que el tercer lugar lo ocupó la torrecampeña Fina Colmenero. Como broche final, y mientras que el jurado debatía, el grupo de baile de Manuel Jiménez cautivó a los allí presentes con una gran actuación que el público, que casi completaba el aforo, agradeció entre aplausos.
El festival, gestionado y organizado por la Peña Flamenca y Literaria Peñarriblense y patrocinado por el Ayuntamiento de Peñarroya-Pueblonuevo y la Diputación de Córdoba, contaba con unas normas básicas. Todos y cada uno de los participantes debían ejecutar cuatro cantes, uno obligatorio – una taranta- y tres de elección libre, pero sin repetir los ya realizados en las pruebas clasificatorias.
La encarga de romper el hielo fue Fina Colmenero, con Fernando Rodríguez a la guitarra. Comenzó con una petenera, seguida por unas seguiriyas, unos caracoles y finalizando con la taranta obligatoria de temática minera. Su voz, más aguda que las del resto, pareció calar hondo en el público, que la colmó de piropos y aplausos.
La segunda en subir al escenario fue Rosi Campos, acompañada del montemayorense Ángel Mata a la guitarra. La malagueña decidió iniciar su actuación con la taranta, para después continuar con una seguiriya, una granaina y media y finalizar con unas bulerías. La voz de Campos era más grave que la de su contrincante y su puesta en escena más intensa, tanto por sus gestos como expresiones.
En tercer lugar, Antonio José Nieto, que arrancó con una caña granaina, a la que siguió una media granaina, unas alegrías y, por último, la taranta imprescindible. El lucentino, al que también acompañó Ángel Mata a la guitarra, tuvo una gran acogida por el púbico que, a la hora de decidir, estaba equitativamente repartido entre los tres.
Mientras que el jurado deliberaba, el bailaor Manuel Jiménez, ganador de varios premios revelación y artes escénicas en Veo Veo y finalista del programa Tú sí que vales, bailó al son de cantes de levante y por fiestas.
El tribunal, formado por María del Carmen Muñoz, Ángela Pérez Castaño, José Manuel Hierro, Benjamín Mohedano y Manuel Benítez, se decantó por Antonio José. La duda estuvo entre él y Rosi Campos. Lo que determinó la elección fue la precisión del lucentino, que no cometió fallo alguno, mientras que la malagueña no consiguió hacer unas bulerías perfectas. Asimismo, la vocalización de Nieto fue superior, lo que facilitaba que el público asistente entendiera al completo cada una de las frases pronunciadas.